No sólo son el grupo que se oye este año en "Bienvenida realidad". Con Ramires!, la banda más ambiciosa de su generación, el rock chileno de la nueva década ya suena en TV y cruza fronteras.
David Ponce
Chicos de ciudad: Ramires Himself (voz y guitarra), Agent Mitnik (bajo), El Camino Cruz (guitarra) y Matt Lee Rock (batería). |
Todas las vías son válidas para mostrar una canción en la ciudad. Vía X, MTV o los televisores sobre los andenes del Metro ya han transmitido el video de un grupo que recorre las calles del centro de Santiago y termina rockeando en la Plaza de Armas bajo el nombre de "Acción!". Ese grupo es chileno, lleva dos años tocando en vivo su prendido rock de guitarras en bares y festivales, se llama Ramires! y para este año tiene más acción agendada.
Ramires! no deja nada al azar. Sus alias de película barata de espías o vaqueros –Ramires Himself (voz y guitarra), El Camino Cruz (guitarra), Agent Mitnik (bajo) y Matt Lee Rock (batería)– son tan cuidados como la deliberada falta de ortografía y puntuación del nombre o como su ofensiva audiovisual. Han tocado tres veces en "El interruptor" de Vía X, suman dos clips con el reciente "Luces", filmado por la productora TVPiratas en diversas locaciones santiaguinas, y la ambición de Ramires! ya llegó a la televisión abierta. La misma "Acción!" suena cada martes a las 22.45 horas al comienzo de la serie "Bienvenida realidad" de TVN, donde el grupo encabeza la banda sonora además con las canciones "Luces" y "La puerta negra".
"Es como para seguir confirmando que en la televisión hemos hecho mucha más difusión que a través de la radio", compara Matt Lee Rock, cuya banda ya colaboró en 2004 con la primera temporada de la serie.
–Y tal como hizo Guiso el año pasado, ¿ahora aparecerán integrantes de Ramires! en la serie?
"No. Yo creo que se nos fue pedir un cameo", considera el baterista.
"En todo caso mucha gente nos lo ha comentado, ha llamado la atención. Y la idea ahora es tomar la versión de ‘Acción!’ que grabamos en Buenos Aires para lanzarla a la radio a través de TVN", explica Agent Mitnik.
"A ver si lo bailan en ‘Rojo’, también", sondea El Camino Cruz.
Buenos Aires rock
Al lado del primer clip de Ramires!, que consiste en una sola toma filmada en movimiento y contra viento y marea en la calle, el segundo es un lujo: decenas de planos a todo color en la sala de ensayo del grupo, un edificio, el centro y la campiña, entre otras muchas locaciones.
"La idea era no hacerlo igual. El primero tiene muchos cojones. El segundo es más meditado", compara Ramires Himself. "Pero los dos tienen humor. Y los dos son de Santiago. Nos gusta cómo se ve la ciudad".
Fue el grupo el que llevó personalmente sus clips a las oficinas de MTV en Buenos Aires cuando tocaron allá en diciembre pasado. "Y me gusta rescatar que ("Luces") tuvo la gracia de ser un video de súper bajo presupuesto", agrega Agent Mitnik. "La primera vez que íbamos a hacer un video se suponía que había que tener un presupuesto de setecientas lucas. Y finalmente se necesitaba sólo el talento joven que hay hoy día. Nos ha ido bien con esa política de trabajar con gente que no está consagrada pero es talentosa".
Ramires! tiene además dos CDs listos para lanzar a la calle. En marzo y abril volvieron a Buenos Aires a grabar su primer disco de larga duración, que esperan publicar en septiembre. Y en el verano editarán
Rock guerrilla vol. 2: cuatro canciones grabadas en vivo que marcan la continuación de
Rock guerrilla vol. 1 (2004) y que sustituyen la descarga eléctrica del grupo por armónica y guitarras acústicas.
El dueño de casa en Buenos Aires fue Alejandro Lerner, el baladista argentino que alguna vez fue rockero. En sus estudios de El Pie el grupo grabó diez de las canciones con que han difundido en vivo un estilo encomendado a Jimi Hendrix o los Rolling Stones, como "El rock de los muertos", "Chico de ciudad", "A tus pies" o "En el camino". Y allí se toparon con el propio Lerner y con Juan Sebastián
Juanse Gutiérrez, el cantante de la banda Ratones Paranoicos, imagen y semejanza argentina de los Rolling Stones.
–¿Cómo fue la grabación en Argentina?
"Los dos primeros días tuvimos el estudio cerrado para nosotros; los tres últimos fueron con horario nocturno. Lerner y Juanse estaban grabando una canción. Y buena onda, llegaba a saludar", recuerda el cantante, además de mencionar que Matt Lee Rock enriqueció a su vez el disco con el piano eléctrico Fender Rhodes y el órgano Hammond que había en el estudio. El vínculo para grabar se dio en el fragor de los escenarios: Ramires! conoció en Santiago a Gonzalo
Pájaro Rainoldi, guitarrista del grupo argentino Amoeba, quien trabajaba en El Pie y ha grabado a varios grupos independientes argentinos como Los Álamo, Los Tormentos o Alienados.
–¿Cómo está la escena de esos grupos en Argentina en comparación con Chile?
"Es enorme", dice el cantante. "Tiene una cultura más rockera, pero lo que me impresiona de las bandas con que hemos tocado allá es lo poco relevantes que son dentro de la escena: igual son bandas que se sustentan, pero les cuesta más que aquí salir en los diarios o en los programas".
No por salir en la tele Ramires! ha dejado de tocar en vivo. La banda, que el año pasado actuó en festivales como Pulso y abrió el concierto de la banda estadounidense The Lemonheads en Santiago, ha incrementado su agenda de conciertos en 2005 y acaba de ser parte del festival TV Piratas, donde levantó a las más de 350 personas congregadas el sábado 10 de junio en el Teatro Novedades.
El grupo a menudo sostiene un encuentro cercano con la audiencia. Pasó con ese borrachín ABC1 que hace unas semanas en el bar Mambo se dedicó a provocarlos porque no lo dejaban subir a tocar guitarra al escenario. "Sí, te tenemos miedo", respondió Ramires Himself: "Miedo al ridículo". Y pasó con ese joven punk que sacó de sus casillas a Agent Mitnik al irrumpir en el escenario de TV Piratas y desordenar el show.
"En el fondo lo que nos está pasando es que hay que hacerse responsable de gente que ni siquiera conoces", analiza Matt Lee Rock. "El grupo está empezando a ser de más gente que nosotros cuatro. Estoy pensando en que, por ejemplo, si mañana queremos sacar un disco más suave, va a ser lo mismo: ‘se vendieron’, ‘cambiaron’, ‘me traicionaron’".
–Uno de los discos nuevos va a ser más suave, de hecho.
"Y nos ha pasado, que en tocatas acústicas llegan tipos diciendo ‘Oye, pero cómo arrugando así’. Y qué, si yo quería tocar la guitarra acústica", sonríe el baterista. De cualquier modo es difícil que Ramires! suene despacio. Su primer concierto desenchufado fue hace un par de meses en un bar de Ñuñoa. Y de todos modos llegó la policía a interrumpir. Algo de acción se habrá escuchado desde afuera.
