EMOLTV

Legendario Blue Note celebra sus 30 años de jazz con gran festival

Con la presencia del eminente y nonagenario compositor y pianista Dave Brubeck, el club neoyorquino inicia una fiesta musical todo el mes.

01 de Junio de 2011 | 11:19 | EFE
imagen

Historias de Nueva York. Un taxi amarillo, un toldo con forma de piano en la entrada y la noche interminable en la capital mundial del jazz.

Blue Note
NUEVA YORK.- El legendario Blue Note, club donde han actuado algunos de los grandes mitos de la historia del jazz, celebra a partir de hoy un festival con estrellas como el aún más legendario Dave Brubeck, Roberta Flack o Bobby McFerrin, y con el que rinden homenaje a tres décadas de jazz entre las paredes del local neoyorquino.

"Recuerdo que Dizzy Gillespie solía venir incluso cuando estábamos cerrados e invitaba a otros músicos a jugar a las cartas con él. No era difícil venir una tarde y verles todos aquí pasando el rato,” explicó a Efe el presidente del Blue Note, Steven Bensusan, hijo del fundador del bar neoyorquino, Danny Bensusan.

El club se convirtió en hogar para “jazzmen” como Gillespie, el mítico trompetista de los mofletes hinchados, quien ayudó a convertir ese local del Greenwich neoyorquino en uno de los más reconocidos bares de jazz del mundo.

Historias en la ciudad que no duerme

Sin embargo con el paso de los años el lugar ha perdido parte de ese sabor genuino con sus desorbitados precios de entrada y sus multitudes agolpadas por conocer este pedazo de la historia del jazz.

Bensusan recuerda cómo creció viendo “espectáculos legendarios que solo ves una vez en la vida” como los de “La Divina,” como se conocía en los círculos de ese género musical a Sarah Vaughan, quien a lo largo de su carrera -no falta de actuaciones en el Blue Note- cambió el concepto de la interpretación vocal del jazz.

Otras leyendas que pasaron en sus comienzos por el bar neoyorquino fueron Ray Charles o B.B King, e incluso Oscar Peterson, quien a juicio de Bensusan “reformó el concepto del cuarteto de jazz en esta sala,” todos ellos grandes nombres de la música que en un principio fue difícil convencer para que actuaran en ese local.

"En los años '70 las estrellas del jazz y el blues no acostumbraban a tocar en locales como éste sino en grandes salas de conciertos,” recuerda Bensusan, por lo que su padre “se dio cuenta rápidamente de que hacía falta en Nueva York una sala donde los grandes músicos pudieran volver a los clubes.”

Por ello en 1981 Danny Bensusan decidió fundar ese local, un lugar “exclusivo donde escuchar jazz en directo, donde una pareja pudiera pasar una noche agradable, cenar y ver un buen espectáculo, en contraste con los clubes de la época donde sólo iban fanáticos del jazz y que eran principalmente sótanos llenos de humo,” asegura.

La lucha en Nueva York entre los locales como el Blue Note, donde se sirven cenas y suelen estar abarrotados de turistas, y los pequeños locales donde no se puede comer como el Village Vanguard continúa, pero lo que es cierto es que el legendario club todavía logra atraer a algunos de los mejores nombres de la escena del jazz de hoy en día.

Para corroborarlo los Bensusan lanzan desde hoy el Blue Note Jazz Festival, un festival con vocación anual que no solo trata de rendir un homenaje a los “buenos viejos tiempos” del local neoyorquino sino también demostrar que sigue atrayendo a jazzistas como Dave Brubeck, Nancy Wilson, Bobby McFerrin, Chaka Khan o Roberta Flack.

También participarán en ese festival jóvenes promesas como Madeleine Peyroux o Manhattan Transfer, quienes durante todo el mes de junio inundarán la Gran Manzana de jazz y lo harán no solamente en el icónico local del Greenwich neoyorquino, sino también en los otros dos clubes que poseen los Bensusan en esta ciudad, el Highline Ballroom y el B.B King Blues Club & Grill.

Otros nueve bares y salas de conciertos de la ciudad como el Joe’s Club o el Poisson Rouge se unirán a esta fiesta musical. Con este festival el Blue Note cubre además el vacío que había dejado en Nueva York este año la ausencia del New York Jazz Festival que solía impulsar en junio el productor George Wein.

El Blue Note Jazz Festival tratará de demostrar además que este género musical está vivo y que “el Blue Note seguirá abierto por muchos, muchos años, porque la experiencia del jazz en directo es algo que no puede ser copiado,” según Bensusan.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?