Director chileno Sebastián Brahm estrena en Toronto "El circuito de Román"

TORONTO.- En momentos en que el sistema educativo está en entredicho, el director Sebastián Brahm presenta hoy en el Festival de Cine de Toronto su ópera prima, "El circuito de Román", una historia que se desarrolla en gran parte en el ambiente académico chileno.

"Chile es un país estrecho. Se lucha a codazos por el poco espacio que hay. La lucha por la sobrevivencia en el ámbito de la academia, haciendo ciencia en la periferia, sin espacio ni recursos, me parece una buena manera de describir una sociedad sofocante", apuntó Brahm en entrevista con dpa.

"El circuito de Román" es la historia de un experto en memoria, Roberto Román (Cristián Carvajal) que regresa a Chile para enseñar en la universidad que abandonó diez años antes como alumno estrella. Experto en el campo de la neuropsicología, desarrolló importantes teorías acerca de la migración de la memoria.

Sin embargo, a pesar de la gran reputación que cimentó en su juventud, su carrera se encuentra estancada, y Román se encuentra trabajando en Chile para su viejo amigo y adversario, José (Alexis Moreno) y tratando de recuperar el respeto de su antiguo mentor, Osvaldo (Pablo Krögh).

"No me interesa sólo la memoria, sino la mente humana en general, desde una visión muy materialista, muy marcada por la biología. Lo que llamamos alma es la vida mental y ella emerge de una estructura material que la ciencia intenta conocer mejor. Me parece un terreno fértil", explicó Brahm.

Para Brahm, la memoria forma parte de un debate presente en la sociedad chilena, en la que hay dos relatos mutuamente excluyentes. Sin embargo, en su opinión, "el pasado no existe". "Sólo existe su actualización fugaz en los recuerdos. Es un proceso físico, electroquímico, dinámico por naturaleza. El mero hecho de recordar conscientemente distorsiona el recuerdo, porque cada vez que esto ocurre debe ser recodificado, incluyendo tal vez la instancia en que ha sido evocado".

Para ser su ópera prima, la coproducción chileno-argentina de Brahm no ha empezado con mal pie. Su film integra la sección "Discovery" del TIFF, dedicada a primeras y segundas películas, y es una de las pocas cintas chilenas del festival, junto a "Bonsái", de Cristian Jiménez, basada en la novela homónima de Alejandro Zambra, y "El año del tigre", de Sebastián Lelio.

"Estoy muy contento. Es una rareza de película, bastante difícil de situar para los festivales. Por tema, estilo y mundo retratado no calza en el estereotipo de película latinoamericana independiente", dijo Brahm sobre su presencia en el festival. "Por eso me resulta especialmente satisfactorio que un festival grande, con vocación de industria, se haya interesado", añadió.