Goldfrapp: "Me gusta jugar con ideas y sonidos nuevos"

SANTIAGO.- Es temporada de festivales de pop y rock en el Cono Sur y Alison Golfrapp lo tiene claro. La cantante del dúo inglés Goldfrapp viene de tocar con su banda en un festival en Brasil y en el certamen "Personal Fest" en Buenos Aires, y ahora está en Santiago para actuar en unas pocas horas (ver recuadro) en un show preparatorio del festival "Maquinaria", anunciado para este fin de semana en la capital.

-Me encantó -dice, acomodada a las diez de la mañana en uno de los sofás del hotel Crowne Plaza en el centro de la capital, a propósito de esta primera visita sudamericana de su carrera-. De verdad disfruté Brasil y Buenos Aires es una ciudad fantástica. Me encantaría volver otra vez y ahora para hacer nuestros propios shows, tal vez no como parte de un festival. Dar nuestro show completo sería muy agradable.

-¿De todos modos hay cierto desafío en compartir festivales, lidiar con otros grupos y músicos?
-Sí: lidiar con que cuando estás en tu camarín suena PUM PUM PUM: eso es un desafío -responde, con una cuota de ironía para iniciar la mañana-. No, pero en serio, con los festivales en realidad no sabes qué va a ocurrir. No sabes qué esperar. El público no es necesariamente tu público, aparte de que técnicamente es probable que haya errores. Es un mundo de dudas, hacer un festival. Puede ser asombroso, o puede ser todo lo contrario. Pero habitualmente es entretenido.

-¿Cómo fue en particular en Brasil y Argentina?
-El "Personal Fest" fue extraño, porque había una inmensa área VIP frente al escenario. Y era un poco raro. A nadie le gusta mucho eso, con gente tomando un trago, sentadas a la mesa. Es básicamente demasiado frío (cool). En el festival en Sao Paulo la gente estaba más normalmente mezlada entre sí. Como parte de un grupo desde el escenario lo que uno quiere es sentir esa energía. He visto áreas VIP, pero no tan grandes. Y no al frente del escenario.

Las bases electrónicas de la música de Goldfrapp a cargo de Will Gregory ("Will no sale de gira. En vivo soy yo y la banda, y hemos estado tocando sí por mucho tiempo", dice ella) y el carácter particular de Alison Goldfrapp como cantante son los dos atractivos principales de este grupo iniciado en 1999, como se oye en los sonidos desde ambientales hasta pop y bailables de sus cinco discos, Felt mountain (2000), Black cherry (2003), Supernature (2005), Seventh tree (2008) y el más nuevo, Head first (2010).

-Los describiría como diarios -dice Alison Goldfrapp en retrospectiva-. Reflejan ciertos sentimientos y ciertas épocas, y ese elemento hace que se trate de un acercamiento muy personal. Me gusta experimentar, jugar con ideas y sonidos nuevos, con cierta evolución natural que se da en la música.

-¿En ese sentido qué cosas refleja Head first, el más nuevo?
-Diría que ese último disco tiene de alguna manera un sentimiento de inocencia, una especie de ingenuidad. Y al mismo quería hacer algo muy luminoso y optimista. Es muy poppy, Head first. Posiblemente demasiado poppy para mí. No creo que vuelve a ir por ese lado de nuevo.

-¿Alguna mala experiencia?
-No, ninguna mala experiencia, al revés, fue algo deliberado, pero fue un sonido sólo para ese momento. Eso es: el modo en que trabajamos es muy instintivo, para bien y para mal. Pero me gustan muchas de esas canciones y me encanta tocarlas en vivo.

Canciones de discos previos como "Human" y "Satin chic" muestran algunas de las posibilidades que la cantante imprime al sonido del grupo, con ciertas influencias cercanas a lo "latino" estilizado y glamuroso. "Cuando era niña escuchaba a cantantes de los años '50 y creo que tuve una gran influencia de la música de esa era. Siempre he sido una fan de eso. Yma Sumac de verdad me encanta, esa clase de música épica, cinematográfica, de los '70 y los '60. 'Satin chic' creo que viene más de una especie de época más cercana al glam rock".

-¿Están tocando esas canciones?
-"Satin chic" sí la estamos tocando. "Human" no en esta ocasión, pero a veces la hacemos.

-Es interesante haberla dejado afuera justo en una gira sudamericana, considerando que Yma Sumac era peruana.
-¿Era peruana? No sabía eso. Bueno, siempre hacemos cambios en el repertorio, como un modo de mantener la música fresca. Pero es difícil hacerlo todo. Hay que elegir.