SANTIAGO.- Su rechazo a la discriminación en los establecimientos educacionales del país, cuando ella implica un tratamiento de inferioridad o desfavorable a ciertas personas o colectividades, formuló a través del área de Educación la Conferencia Episcopal de Chile.
El organismo señala que en esta actitud la Iglesia ve un atentado a la dignidad de los seres humanos, por lo que invita, de acuerdo con el Concilio Vaticano Segundo, a "eliminar como contraria a Dios toda discriminación por motivos de raza, sexo, lengua y religión".
Presidida por el obispo de Valdivia, monseñor Ricardo Ezzati, el área de Educación de la Conferencia Episcopal emitió un documento en el que relaciona el tema de la discriminación con el derecho fundamental de todo hombre y mujer a educarse, así como con el derecho a la libertad de enseñanza.
También se refiere a la convivencia en los colegios, a la disciplina y a los criterios que deben aplicarse en materia de sanciones.
El documento hace presente también que existe un tipo de discriminación positiva que permite distinguir una cosa de otra con la finalidad de dar un tratamiento especial por alguna consideración particular.
En cuanto al derecho a educarse, la iglesia señala que esta es una facultad inalienable de las personas y anterior a toda ley positiva. Y que ella incluye el derecho a escoger, según la propia conciencia.
