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Germán Correa: "Al ritmo actual esta ciudad colapsaría"

El recién designado coordinador en materia de transportes para Santiago, el ex ministro de Aylwin y Frei, Germán Correa, tendrá como misión reestructurar el sistema de transporte público urbano, a fin de que en el futuro cercano existan los incentivos suficientes para dejar el auto en los hogares.

06 de Marzo de 2002 | 09:44 | Mauricio Campusano, EMOL
SANTIAGO.- Consciente de que la tarea que le encomendó el Presidente Ricardo Lagos en materia de transporte es enorme y muy compleja; el ex ministro de esa cartera durante la administración Aylwin, y quien ocupara la de Interior durante el gobierno de Eduardo Frei Ruiz Tagle, Germán Correa, fue designado el viernes pasado como el coordinador de la Comisión Asesora Presidencial del Transporte de Santiago, entidad que tendrá a cargo reestructurar el sistema de transporte público de la capital para los próximos años.

La idea es que Santiago cuente con un sistema integrado y moderno de transporte público, capaz de desincentivar el uso del automóvil. Y para ello, la primera misión de Germán Correa será llevar a cabo el nuevo proceso de licitación de transporte público de pasajeros, que él mismo inició el año 1992 y que –en sus puntos centrales- pretende reducir la actual cantidad de recorridos, lograr la integración tarifaria en los distintos medios de locomoción según los tramos recorridos, incentivar el uso de tecnologías limpias y la implementación de estaciones de transferencia entre un servicio y otro.

- ¿Cuáles van a ser las principales directrices que contemplará el nuevo llamado a licitación que le encargó el Presidente Lagos?

- Es un plan muy vasto que toca a todos los sectores, a todos quienes ocupamos vialidad en la ciudad de Santiago. Esto significa que los autobuseros, los automovilistas, el transporte de carga, el transporte interurbano, ferrocarriles y el metro están incluidos en el plan. Delinearlo punto por punto sería interminable, pero el eje será mejorar el transporte público. Ello implicará una coordinación no sólo del ámbito público, sino que también del privado. Y para llevar a cabo esa coordinación, es que el Presidente Lagos me designó en el puesto.

- ¿La idea es que Santiago cuente con un sistema de transporte moderno de aquí al bicentenario, en el 2010?

- Lo que nos ha pedido el Presidente es dimensionar las aspiraciones del plan de transportes, de manera de tener a Santiago con otro rostro el 2010. No obstante, este proyecto está pensado para completarlo durante esta administración, pues nadie sabe qué pasará después.


- ¿Cómo espera que sea la relación con los microbuseros, teniendo en cuenta que para el próximo año se pretende modernizar el transporte de pasajeros, lo que implicará nuevas inversiones, elevados estándares de calidad, pagos diferidos y recorridos más cortos?

- Espero que sean las mejores posibles. Ellos ya me conocen cuando fui ministro de Transportes y saben que puedo negociar, pero siempre y cuando no nos alejemos de los objetivos planteados. Voy a hacer todo lo que sea necesario para cumplir con los objetivos del plan; y, al igual que la licitación a principio de los noventa, me gustaría hacerlo con ellos. Naturalmente que si existen conflictos se recurrirá al diálogo, pero no puedo alejarme de los objetivos establecidos por la autoridad.

- ¿Cuándo piensa reunirse con los gremios microbuseros?

Durante marzo nos entrevistaremos con ellos y lo vamos a hacer en una reunión conjunta con el ministro de Transportes y Obras Públicas, Javier Etcheverry, quien por lo demás está aún interiorizándose del trabajo de la cartera.

- ¿Qué puede espera la gente de este nuevo plan de transportes?

- Será un plan integral muy ambicioso que cambiará el rostro de esta ciudad. La idea central es mejorar el transporte público para que la gente deje el auto en su casa, pues de lo contrario, al ritmo que está creciendo el parque automotor, en diez años más andar por Santiago va a ser insoportable, pues la ciudad colapsaría. No tiene sentido referirme a detalles del plan, porque es una lista interminable, porque lo importante es que existe una coherencia y convencimiento de que hay que elevar los estándares de calidad y alcanzar una mayor eficiencia del transporte público de Santiago.

- ¿A qué atribuye que siendo el transporte público una actividad privada, en que se supone se hacen mejor las cosas, ésta no entregue un servicio de calidad como debería hacerlo?

- Hay razones de fondo que explican esto, que tiene que ver en cómo se organiza y estructura esta actividad económica como tal. A diferencia de otras actividades, ésta no tiene una rendición económica que de cuenta precisamente de una gestión eficiente. Más allá de los cambios que impulsó el gobierno del Presidente Aylwin a principios de la década pasada, en que se ordenó en algo el sector, siguen existiendo problemas de fondo, de cómo está organizada económicamente la actividad. En otras palabras, la forma en como se organizan los factores productivos para entregar un producto final, está mal conformado. Y ése es, justamente, el problema que queremos atacar. Por cierto que en su búsqueda nos encontraremos con otras dificultades que también se mejorarán.

- En algunos países europeos, donde existe un eficiente sistema de transporte público, el Estado juega un rol importante como administrador e invertir. ¿Es posible que en Chile el Estado invierta e intervenga para ordenar y administrar el sistema?

- En Chile, el Estado juega un papel muy importante en lo referente al transporte público. Por ejemplo, las inversiones para la extensión de la línea de metro, en las que el Presidente Lagos duplicará los kilómetros de línea construidos. También el Estado hace una significativa inversión en vialidad, que, sin duda, mejora el sistema de transporte de la capital. Aun así, el tema radica en que siendo una actividad privada, ésta puede mejorar aún mucho más, sin que tenga que intervenir la mano del Estado.

- De qué manera el plan de transporte afectará a los conductores comunes y corrientes?

- Como lo dijo el Presidente Lagos, este plan no está echo contra los automovilistas, sino para ellos, a fin de que cada vez más se opte por el sistema de transporte público. Se trata de hacer más fácil la vida y no seguir con lo que sucede ahora, en que cruzar la ciudad de un punto a otro, significa una amargura en la vida de las personas.

- ¿Qué tan factible es la construcción de vías segregadas y exclusivas para mejorar el sistema de transporte público?

- Eso es parte de las cosas que debemos definir en el nuevo plan. Existen una cantidad importante de estudios que se han realizado para determinar exactamente cuáles son los parámetros de infraestructura que va a ser necesario enfrentar en el proceso de licitación del próximo año en adelante.
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