SANTIAGO.- El obispo de Coyhaique, Luis Infanti de la Mora, se mostró muy satisfecho con la designación de una ministra en visita que se avoque a investigar las 12 extrañas muertes de jóvenes ocurridas en Aysén entre 1997 y 2001.
Luego de reunirse por más de una hora y media con el presidente de la Corte Suprema, Mario Garrido Montt, y el ministro Alberto Chaigneau, el sacerdote no manifestó rechazo ante el nombramiento de la presidenta de la Corte de Apelaciones de Coyhaique, Alicia Araneda, quien hace un tiempo habría emitido comentarios que apoyaban la tesis de suicidio de los 12 jóvenes.
"Confío plenamente en la designación, porque viene de la Corte Suprema de Santiago. Confío en que las personas, a medida que pase el tiempo, nos vamos convenciendo de la necesidad de reformular nuestras declaraciones, y así puede también pasar con la ministra", afirmó el prelado.
Infanti -quien sostuvo que los magistrados Garrido y Chaigneau fueron muy comprensivos- llamó a la comunidad de Aysén, especialmente a aquellas personas que tengan antecedentes sobre las muertes, a que los hagan llegar con prontitud a la justicia o a la Iglesia.
"Es sumamente importante que la gente aporte con la mayor confianza, venciendo muchos miedos y temores, que en Aysén todavía persisten. Que declaren todo lo que quieran, todo lo que puedan, sea a la ministra o a la Iglesia", enfatizó el obispo.
En la oportunidad, Infanti reiteró ahora ante el presidente de la Corte Suprema, sus disculpas a todas aquellas personas que pudo haber ofendido con sus dichos, referidos a que en la corte de Aysén algunos magistrados protegían a redes de narcotráfico y por ello no prestaron toda la atención a la investigación sobre las 12 extrañas muertes. Asimismo, el sacerdote no quiso hacer nuevas declaraciones al respecto.
Finalmente, el obispo se mostró muy contento con el hecho de que la Corte Suprema haya decidido reabrir los 12 casos, y no sólo los cinco por los cuales el abogado Hugo Gutiérrez se querelló hace más de una semana. "Creemos que esto es sumamente importante por las vinculaciones que podrían haber en todas ellas", puntualizó.
Graves acusaciones
El jueves de la semana pasada, el Obispo de Aysén Luis Infanti de la Mora acusó que miembros del poder judicial de Aysén protegían a operaciones de narcotráfico y por ello no habrían trabajado en la forma debida para investigar el tema.
Luis Infanti criticó además la pasividad con que los magistrados han actuado en el caso. "La justicia ha tomado decisiones débiles y limitadas que han impedido conocer la verdad", opinó.
En la oportunidad, el prelado también comentó que un magistrado de Puerto Aysén (refiriéndose al juez Carlos Klapp, que fue fotografiado desnudo con unas prostitutas y luego destinado por la Corte Suprema al Juzgado de Chiloé) fue sacado de su cargo por las redes que operan en la zona, para impedir el desarrollo de la investigación.
"Esta mafia secreta vinculada al narcotráfico tiene efectos colaterales, como son las redes de prostitución, homosexualidad, pedofilia y alcoholismo, y eso quedó claro en los antecedentes aportados en la querella".
Aseguró que "es sumamente grave esta podredumbre moral amparada en asociaciones secretas, que incluso podrían llegar a tener más poder que las instituciones del Estado".
En los antecedentes entregados a la Iglesia queda claro que no hay instituciones involucradas en los hechos de Puerto Aysén, "pero sí personas de instituciones que actuaron para tapar la verdad", comentó.
Denuncias deben hacerse en tribunales
El recién asumido presidente de la Asociación de Magistrados, Diego Simpertigue Limate, sostuvo hoy que denuncias tan graves como las que hizo el jueves pasado el obispo Infanti deben hacerse en la corte y no a través de los medios de comunicación, "porque por muy importantes que sean tienen una función distinta a la de los tribunales de Justicia".
Al respecto, instó además a "toda persona a que si tiene alguna denuncia que hacer lo haga a través de las vías que corresponden".
Simpertigue, ministro de la Corte de Apelaciones de Concepción, se entrevistó hoy con el Presidente de la Corte Suprema, Mario Garrido, después de que lo hiciera el obispo de Coyhaique.
Tras el encuentro, el magistrado calificó como acertada la decisión del pleno del máximo tribunal de designar a un ministro en visita en el caso Aysén. "Me parece que los jueces y ahora la ministra que se ha designado, tienen la responsabilidad de investigar y tomar las decisiones que el caso amerite".
