Fernando Batlle respalda dichos contra Errázuriz: "Nunca vi un encubrimiento tan claro"

SANTIAGO.- En un férreo apoyo a las declaraciones vertidas por el médico James Hamilton en contra del cardenal Francisco Javier Errázuriz, este jueves otro de los ex feligreses que dice haber sido abusado sexualmente por el sacerdote Fernando Karadima salió a acusar de encubridor al ex arzobispo de Santiago.

"Ratifico como testigo y según la vivencia que tuve durante mi niñez y adolescencia en el Bosque, que todo lo que dijo James Hamilton en el programa Tolerancia Cero del día domingo es la verdad, es totalmente cierto. Tuvo mucha valentía. Llamó a las cosas por su nombre, dijo la verdad, pese a las presiones, maniobras y abusos de poderes fácticos ligados a Karadima, el cardenal y la Iglesia", sostuvo a través de una carta.

Con estas palabras el abogado respaldó la acusación realizada por Hamilton quien trató de "criminal" a Errázuriz por no haber puesto freno al comportamiento del sacerdote Karadima cuando tuvo conocimiento de las denuncias.

Al respecto, el profesional dijo  que antes de denunciar ante la justicia al religioso "acudí primero a su oficina, donde se negó a recibirme y luego le escribí un extenso mail contándole toda mi situación, el que no me contestó. Nunca antes vi un caso de encubrimiento tan claro. Las cosas hay que llamarlas por su nombre. Eso no es prudencia".

Esto último lo dijo Batlle en alusión a los dichos del cardenal Errázuriz quien se defendió hace algunos días asegurando que él no tuvo un actuar negligente en la causa y que no era criminal quien buscaba la verdad con ponderación.

Preocupación porque se repitan los hechos

Batlle dijo que su denuncia en la justicia ordinaria está vigente y que lo que más le preocupa en estos momentos es que sacerdotes que fueron formados por el ex párroco de la Iglesia de El Bosque "repitan las mismas conductas dañando a más personas inocentes", incluso advirtió que podría estar pasando ahora mismo.

"Hay muchos curas formados por Karadima que no deberían tener contacto con niños y jóvenes, esas deberían ser las primeras diligencias preventivas que se deberían dictar en honor a una auténtica justicia y sentido de protección a la comunidad. Es una irresponsabilidad que los curas que pertenecían al círculo de Karadima sigan en contacto con niños y jóvenes", denunció. 

Asimismo expresó que busca que a la comunidad le quede clara la verdad "sin dudas, y por la protección de todas y cada una de las personas abusadas y calladas, y que callan porque se avergüenzan porque llegaron a éste y otros curas con una intención honesta e inocente y fueron engañados".

El jurista hizo un llamado a que no tengan miedo de denunciar quienes han pasado por situaciones de abusos sexuales como él y que no sientan que "su virilidad va a ser afectada o cuestionada por eso. Quiero decirles: No se equivoquen, esto los hará mucho más hombres y los reafirmará".

Criticó el actuar que hasta el momento ha tenido el Poder Judicial y recordó que lo que se necesita es "proteger a las personas que valen mucho más que una institución añeja como es la prescripción. La ley no está por sobre las personas". Esto último en base al sobreseimiento definitivo del caso dictado en primera instancia y la posterior reapertura del caso.

El abogado Batlle analizó que  "los abusados por Karadima a lo largo del tiempo pudieron haber ascendido a varios cientos, sin contar con los que se quedaron con él (sacerdotes y seminaristas)".

Tocaciones y humillación

En la extensa carta, habla además de cómo el prelado ocupaba el momento de la confesión para realizar las tocaciones y que después ese "tanteo" lo justificaba en muestras de cariño, haciéndolos sentir a ellos la culpa de lo que había sucedido.

Asimismo, recuerda cómo Karadima humillaba a ciertos sacerdotes y a él mismo.

"Aquí hay muchas personas de la Iglesia involucradas, lo que pasa es que nadie se atreve a decirlo. Es algo que mucha gente se pregunta. Mucha más gente que James, José Andrés, Juan Carlos, Luis Lira y yo que hablamos en su oportunidad. Aquí hay una red de protección por parte de la propia Iglesia, porque este es un problema de la Iglesia, va mucho más allá de Karadima", sostuvo.