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Sacerdote denunciado por abuso sexual en Curicó asegura a apoderados que es inocente

El presidente del centro de padres del Instituto San Martín señala que Francisco Cartes Aburto niega las acusaciones y que está "muy afectado sicológicamente".

29 de Marzo de 2011 | 14:15 | Por Leonardo Núñez, Emol
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Isabel Hernández, jefa de la Unidad de Víctimas y Testigos, guía la investigación sobre la denuncia de abuso sexual en contra del capellán Francisco Cartes.

Juan Carlos Romo, El Mercurio

SANTIAGO.- Tras ser denunciado de cometer abusos sexuales en contra de un menor de 16 años, el sacerdote Francisco Cartes Aburto (50) pasa los días recluido en su hogar,  "muy afectado sicológicamente" y asegurando que no ha cometido ningún delito.

Así describe a Emol la situación del religioso Víctor Vidal, el presidente del centro de padres del Instituto San Martín de Curicó, donde Cartes se desempeñaba como capellán hasta antes de ser suspendido de sus labores por el obispado.

"Él (Cartes) está choqueado y niega todo eso a todo el mundo que lo ha visitado, que ha sido mucha gente. Él niega que tenga algún tipo de verosimilitud lo que dice (el denunciante)", señala Vidal, que también se ha reunido con el sacerdote después de las acusaciones que derivaron en una investigación de la Fiscalía del Maule.

"La comunidad (estudiantil) está sorprendida, está muy apenada y muy esperanzada de que todo esto resulte de la mejor forma para todas las partes", añade Vidal, quien agrega que pese al cariño que sienten por el religioso, los apoderados apoyan la decisión de la dirección del colegio de llevar los antecedentes a la Justicia.

"Las autoridades del colegio tomaron la determinación de hacer esta denuncia porque es su obligación como responsables del cuerpo de alumnos", explica, puntualizando que el joven presuntamente abusado oficiaba de acólito del sacerdote.

Vidal también señala que no hay más apoderados que hayan hecho denuncias de abuso en contra del sacerdote: "Es la palabra de un estudiante y la palabra, por el otro lado, del capellán (...) que tiene licencia por estrés y que está muy afectado sicológicamente, él está choqueado. Cuando has sido puesto en la palestra público por un tema de este tipo, obviamente que te ves afectado".

"El padre no guarda ningún tipo de rencor, ni contra los que hicieron la denuncia, ni contra el joven, él está preocupado por la salud del joven", sostiene el apoderado.

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