UPI
SANTIAGO.- A pesar de las 300 detenciones que se registraron ayer por desórdenes públicos en el marco del Superclásico del fútbol chileno, Carabineros realizó un positivo balance de las medidas que que se adoptaron.
El desglose de los apresados correspondió a cuatro por la Ley de Violencia en los Estadios, uno por infracción a la ley de control de armas y 25 por infringir la ley 20.000 de drogas.
Además, se realizaron 550 controles de identidad y las fuerzas policiales destacaron que al interior del Estadio Nacional no se registraron mayores desmanes.
La mayoría de los casos delictuales se efectuaron en las inmediaciones del recinto deportivo, pero como señalan en Carabineros "producto de la efervescencia que provoca un partido como este".
De la misma forma, el ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, comentó que "pasamos la prueba" ante los recaudos que se tomaron en la previa del encuentro. En la ocasión, agradeció la colaboración de los ciudadanos, pero advirtió que algunas de las medidas tomadas serán analizadas.
Dentro de las determinaciones que se tomaron para enfrentar el compromiso, estuvo la de exigir a todos, sin excepción, la credencial de empadronado y la cédula de identidad.
Otra de las prevenciones fue que no se vendieron entradas el día del partido y se incrementó la afluencia de transporte público.
