Piñera promulga ley que agrava las penas y restringe beneficios carcelarios a pedófilos

SANTIAGO.- "Un niño abusado no es una noticia, es una tragedia". Con estas palabras, el Presidente Sebastián Piñera expresó la gravedad de los delitos sexuales contra menores. Según reveló, en el primer semestre de este año se recibieron 3.200 denuncias de este tipo, lo que implica que 18 niños habrían sido víctimas de este delito cada día.

Para combatir esta situación, el Mandatario promulgó la ley Ley 20.685, que aumenta la gravedad de las penas y restringe los beneficios penitenciarios a las personas que hayan sido condenadas por el delito de pedofilia.

La ley –que modifica el Decreto Ley 321, de 1.925– impide que los condenados puedan limpiar sus antecedentes antes de 10 años de cumplida la sanción. Actualmente, los plazos son de dos años para quienes delinquen por primera vez y de cinco años para quienes son reincidentes.

Asimismo, aumenta la pena por el delito de comercialización de pornografía infantil, que ahora fluctuará entre los 3 y 5 años de presidio. En la actualidad, ese delito tiene una condena que parte en 541 días.

Además, las personas condenadas por ese tipo de delitos no podrán optar a la libertad condicional sino hasta cumplidos los dos tercios de la pena.

El Mandatario sostuvo que esta nueva ley no es un proyecto aislado, sino que "es parte de una política de Estado que nuestro Gobierno ha impulsado desde el primer día y ha tenido que enfrentar muchas dificultades".

"Con mucha pena, rabia e indignación vemos con demasiada frecuencia graves denuncias de abusos sexuales contra nuestros niños y niñas, cometidos a veces por aquellas personas cuya función y tarea era precisamente cuidarlos y protegerlos", remarcó el Mandatario.  

No obstante, sostuvo que ahora "aquéllos que pretendan seguir atentando contra nuestros niños, se van a encontrar con toda la fuerza de la ley, sin piedad, sin contemplaciones, porque los delitos que cometen son atroces, que destruyen la inocencia e incluso, a veces, las vidas de nuestros niños y, a través de nuestros niños, de sus padres y de sus familias".

"Quiero reiterarles a todos los padres y madres de nuestro país, que en esta materia nuestro Gobierno está cien por ciento comprometido y que no va a eludir ni escatimar ningún esfuerzo, de ninguna naturaleza, para poder combatir con mayor eficacia este brutal y cobarde atentado contra la inocencia de nuestros niños y de nuestras niñas", subrayó.

El Presidente promulgó la ley en compañía de los ministros de Justicia, Patricia Pérez, y del Interior y Seguridad Pública, Andrés Chadwick.