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Caso Bastián: Las pruebas que enfrentan a la Fiscalía y a las defensas por abuso y pornografía

Ayer, ambas partes presentaron al tribunal sendos informes. Se acreditó la existencia de material pornográfico que involucra a sus padres, quienes de todas formas quedaron en libertad.

15 de Marzo de 2014 | 09:23 | Por Andrea González Schmessane, Emol
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Iván Bravo y Mireya Sepúlveda alcanzaron a permanecer cuatro meses en prisión.

El Mercurio

SANTIAGO.- Una serie de informes que ya fueron incluidos en la carpeta investigativa de la causa por abuso sexual, producción y almacenamiento de material pornográfico infantil que enfrentan los padres del joven fallecido Bastián Bravo Sepúlveda, fueron presentados ayer ante el Sexto Juzgado de Garantía de Santiago en la revisión de la prisión preventiva que cumplían Iván Bravo y Mireya Sepúlveda.


En la instancia, tanto el Ministerio Público como las defensas expusieron sus argumentos en base a antecedentes recogidos durante los casi cuatro meses de indagatorias encabezadas por la fiscal Centro Norte Paola Trisotti luego de descubrirse -en el marco de una investigación paralela- la existencia de imágenes de connotación sexual que involucraban a la hija menor del matrimonio.


La Fiscalía apostó por la exhibición de un análisis policial que establece la disfuncionalidad familiar, violencia intrafamiliar y problemas de alcoholismo, específicamente de Sepúlveda, como el escenario que albergó a Bastián y a su hermana menor durante los últimos años.


Defensa apela a la inexistencia de los delitos


Por su parte, la defensa -liderada por el abogado Álex Carocca- leyó un análisis realizado por el psicólogo de la Universidad de Valparaíso, Leonardo Zúñiga, quien luego de presenciar la pericia de credibilidad que se le realizó a la menor en dependencias del Centro Asistencia a Víctimas de Atentados Sexuales (Cavas), concluyó que "no existe relato que permita tener por establecida la validez de las declaraciones de la niña en orden a haber sido víctima de un delito de abuso sexual por parte de sus padres".


Dicho informe psicológico forense agrega que tampoco existe narración que pueda estar vinculada al tipo de delito que se persigue, asegurando que la declaración en cuestión -que fue la base de la causa penal- es producto de una inoculación de falsos recuerdos por parte de la funcionaria de la PDI que entrevistó a la menor en primera instancia.


El estudio menciona que en su narración, la niña utiliza un lenguaje que no corresponde al utilizado posteriormente durante la entrevista en el Cavas, puntualizando que no hay ningún tipo de metodología para extraer y analizar el relato prestado por la menor.


Carocca también expuso el resultado de un informe psicológico realizado a Iván Bravo que establece que el imputado "no presenta características criminógenas que signifiquen un peligro para sí mismo o sus más cercanos", y "que no presenta alteraciones psicopatológicas respecto a su configuración de personalidad".


En el texto se destaca la capacidad creativa y social del evaluado, estableciendo que su nivel de inteligencia está dentro de los rasgos de normalidad.


Por último, el abogado Carocca presentó un informe pericial psicológico forense encargado por la defensa en relación a los rasgos de personalidad de Mireya Sepúlveda que concluye que la mujer "posee un coeficiente intelectual dentro del rango normal en base a su grupo social con un estilo de pensamiento preponderantemente funcional".


"Tiene un escaso juicio crítico, es decir, que no logra anticiparse a las repercusiones de sus actos a corto plazo y a su vez, no se evidencian alteraciones formales del pensamiento, es decir, presencia de delirios", agrega el análisis.


Desde el punto de vista psicopatológico, el estudio establece que Sepúlveda tiene la estructura de una personalidad de tipo 'histriónica', según los criterios técnicos utilizados, que habría permitido que la imputada presentara un trastorno depresivo mayor de larga data incrementado por su situación actual, especialmente por el deceso de su hijo mayor.


Todos estos antecedentes, en tanto, deberán volver a ser exhibidos ante la Corte de Apelaciones de Santiago, luego que la Fiscalía Centro Norte apelara a la resolución del juez Sergio Padilla, quien a pesar de dar por acreditada la existencia de los hechos, resolviera dejar en libertad y sin medidas cautelares, a los imputados por estimar que no existe peligro de fuga.

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