BUENOS AIRES.- En tiempos en que los políticos recurren a internet para acercarse a los votantes, los candidatos oficialistas de Argentina se mantienen aferrados a métodos tradicionales como discursos y actos masivos en su campaña para las elecciones legislativas del 28 de junio.
Y mientras los candidatos de la oposición confiesan pasar horas interactuando virtualmente con sus seguidores, el ex presidente y principal candidato oficialista en la central provincia de Buenos Aires, Néstor Kirchner, recorre el distrito con eufóricas alocuciones frente a miles de seguidores.
Para la analista política Graciela Romer, las prácticas revelan "el tipo de base popular que tiene cada uno de ellos", ya que "el peronismo (partido oficialista) apunta a los sectores más tradicionales y a los sectores de más bajos nivel de ingresos y menor nivel de educación".
Según la experta, "son sectores que en general no utilizan internet y son más proclives a vincularse con los candidatos por cuestiones más emocionales que los sectores más instruidos".
Kirchner visita a diario distintas ciudades del país, adonde va junto a otros candidatos como el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Daniel Scioli, y el jefe de Gabinete de Ministros, Sergio Massa, todos candidatos a diputados.
Los principales postulantes para las elecciones de fin de mes, además de su propia página de internet, son activos en el uso de redes como Facebook y Twitter y algunos confiesan que ellos mismos contestan muchos de los mensajes.
El opositor Francisco de Narváez, empresario millonario y candidato del partido de centroderecha Unión PRO por la provincia de Buenos Aires, que concentra casi el 40 por ciento de la población, usa además otras redes como Flickr, Sonico y también YouTube, mientras alimenta su propio blog y no se despega de su BlackBerry.
"Contesta los mensajes desde su BlackBerry porque la tiene pegada a la mano. Se sube al auto, va de un lado al otro y cada vez que para aprovecha para responder algún mensaje", dijo Martín Rodríguez, coordinador del equipo de comunicación de nuevos medios de De Narváez.
"Es una manera más práctica de comunicarse con la gente, que hoy no tiene tiempo para ir a actos políticos", agregó.
Margarita Stolbizer, candidata a diputada por la provincia de Buenos Aires del opositor centrista Acuerdo Cívico y Social y tercera en la preferencia de los votantes según los sondeos, chatea con usuarios de internet una vez por semana y sigue de cerca todo lo que pasa en el mundo virtual.
"Cuando viajo mucho por la provincia, con la compu, más internet inalámbrico aunque sea desde el auto o en cualquier bar, logro tener la oficina ambulante y estar al día con las cosas", dijo Stolbizer a Reuters.
En las elecciones de junio se renovará la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado.
El comicio es considerado una dura prueba para el debilitado Gobierno de la presidenta Cristina Fernández, quien podría perder un vital espacio en el Congreso y enfrentar dificultades para aprobar sus proyectos en los últimos dos años de un mandato fijado para concluir en el 2011.
La economía argentina se está desacelerando tras años de expansión y la población ha visto caer su poder adquisitivo por una elevada inflación no reconocida en las estadísticas del Gobierno.
Sin souvenirs
A la vez, otros tradicionales recursos de los partidos políticos como llaveros, lapiceras, camisas, gorras, libros y hasta termómetros con sus símbolos estampados, desaparecieron de las calles.
"Este año todo el ’merchandising’ brilla por su ausencia en todas las fuerzas políticas. A esta altura de la campaña siempre teníamos más pedidos", explicó Claudia Yerien, dueña de una empresa de productos promocionales con más de 20 años en el mercado que provee servicios a distintos partidos políticos.
"A mi modo de ver, esto tiene que ver con toda la incertidumbre, por la crisis. Todo se está haciendo con mucha cautela. Hay un criterio más dirigido por internet, que son más económicos y tienen mucha llegada al público", agregó.
