Por Pedro Labra (crÃtica publicada el 11 de mayo de 2008)
El reflotaje del Festival del Instituto Chileno-Norteamericano, muy fructÃfero en su primer ciclo (1986-1995), ahora centrado en la dramaturgia estadounidense, nos revela a la destacada autora Paula Vogel a través de su laureada y aplaudida pieza "Cómo aprendà a manejar", de 1997, cuya puesta en escena arrasó con los premios del certamen.
Proclive a las cuestiones controversiales, Vogel presenta a una mujer que recuerda la singular y estrecha relación que la unió entre los 11 y los 18 años con quien le enseñó a conducir un auto, el esposo de su tÃa, en los años '60. Con recursos tan eficaces como estimulantes, el relato retrocede y avanza en la evolución del vÃnculo abiertamente pedófilo con ese hombre 20 años mayor. Un coro se encarga de dar vida a los personajes que los rodean.
Lo incómodo y perturbador es que la historia está contada con amable nostalgia, sin nada de culpa o rechazo. El tÃo, un tipo gentil y considerado, es por lo demás el único que le da afecto a la muchacha. A poco andar queda claro que a la obra le importa poco el abuso y la perversión; lo que le interesa es el juego de poder, quién domina a quién a partir de la urgencia sexual. El enseñar a manejar es sÃmbolo de iniciación, pero sobre todo de control sobre una situación que avanza.
El director Marco Espinoza resolvió en forma adecuada la compleja mecánica de la narración. Claro que el atractivo del montaje radica más que nada en la ambivalente y sensitiva interacción de la despierta "lolita" (Alejandra DÃaz) con el pobre tÃo que frena sus ardores (VÃctor Montero, notable). Los demás personajes lucen trabajados por encima y no bien diferenciados.
Alejandra DÃaz, VÃctor Montero, Annie Murath, Gabriel Urzúa, Carolina Larenas.
Dirección y Dramaturgia: Marco Espinoza
Duración: 105 minutos.
Lugar: Sala Sidarte (Ernesto Pinto Lagarrigue 131, barrio Bellavista).
Funciones: Del viernes 16 al domingo 25 de enero, a las 21:00 hrs.
Precios: $5.000 general, $3.000 estudiantes y tercera edad.
