Boris Johnson se impuso sin problemas a su rival laborista en las elecciones del Reino Unido. Es considerado el sucesor natural de David Cameron en el liderazgo del Partido Conservador.

El contundente triunfo de Mhairi Black, del Partido Nacionalista Escocés, es una muestra más del fracaso de la colectividad opositora en las últimas elecciones en esta zona del Reino Unido.

Conservadores habrían obtenido 316 escaños, seguido por los laboristas con 239 asientos. De esta forma, ninguna colectividad obtendría la mayoría.

Se mantiene incertidumbre y hermetismo a pocas horas del fin de la jornada de votaciones.

Los comicios han estado marcados por la incertidumbre, donde los partidos Conservador y Laborista están prácticamente empatados.

Mientras "The Guardian" publica una imagen del líder laborista Ed Miliband y del líder conservador y Premier David Cameron cara a cara, "The Independent" resalta la importancia del voto de los británicos.

El Primer Ministro británico ve al líder laborista como su gran amenaza para lograr la reelección, en una jornada que será muy cerrada.

Unos 40 millones de británicos elegirán este jueves un nuevo Parlamento, en un comicios que se esperan tengan un cerrado desenlace.

Unos 40 millones de británicos participarán en la jornada que asoma como una de las más inciertas de las últimas décadas.