Los equipos que dan vida a la Fórmula Uno han sostenido intensas conversaciones durante los últimos días para definir las acciones que se tomarán para salvaguardar el futuro de la competencia motor más importante del mundo ante el impacto económico que tendrá la pandemia del nuevo coronavirus.
Como primera medida se acordó que la temporada 2021 se desarrolle con los actuales autos de competición y se retrase la introducción de nuevas normativas, lo que implica una importante reducción de costos.
Pese a que la decisión es una buena noticia, los efectos económicos del Covid-19 son mucho más profundos, por lo que persisten las preocupaciones sobre el futuro de algunas de las escuderías.
Debido a eso McLaren lidera un grupo que pide reducir aún más el límite presupuestario para 2021, originalmente establecido en 160 millones de dólares, y definir un tope de sólo 100 millones por equipo.
Hay negociaciones en curso al respecto y el techo "va a ser rebajado" sin definir hasta dónde, afirmó el 9 de abril pasado el presidente de la FIA, Jean Todt. El directivo agregó que "la competición automovilística, comenzando por la F1, cuesta demasiado cara (...) Hemos tomado ya medidas en ese sentido, pero la pandemia nos hace más difícil asumir esos costes. Hay riesgo de perder equipos y constructores", advirtió.
Las crisis económicas no son algo nuevo para la categoría reina del automovilismo, que se encuentra actualmente detenida y sin haber podido empezar su temporada de 2020, y de ahí la evidente preocupación.
La última fue relativamente reciente, la de 2008, tras la cual abandonaron la competencia varias escuderías de renombre como BMW, Honda, Toyota y Renault.
La F1 resistió a esa crisis gracias a un esfuerzo en el control de gastos y de ahí la demanda en recortar el límite presupuestario, algo que también fue respaldado por informes de la agencia evaluadora Moody's y el banco JP Morgan.
¿Habrá competencia en 2020?
Desde que se decretó la pandemia del nuevo coronavirus la Fórmula Uno ha debido suspender o aplazar sin nueva fecha las nueve primeras citas de la temporada 2020 y las pruebas siguientes, comenzando por el Gran Premio de Francia del 28 de junio, siguen en incertidumbre dado el escenario mundial.
De ahí que la pregunta es si podrá realizar el campeonato mundial este año. En una entrevista a Sky Sports el 8 de abril, el director deportivo de la Fórmula uno, Ross Brown, preveía con optimismo que la temporada pudiera arrancar en julio en Europa, quizás "a puerta cerrada".
"Para un campeonato del mundo, son necesarias como mínimo ocho carreras. Ese mínimo podría alcanzarnos incluso si comenzamos en octubre. Es ahí donde se sitúa el punto crítico", explicó Brown.