La invasión de Rusia a Ucrania ha golpeado rápidamente varias industrias en el mercado europeo, no solo en lo que respecta a combustibles, sino también en la producción de automóviles. La reconocida marca alemana Audi es una de las más afectadas por las consecuencias del conflicto bélico.
A la fecha la firma ha puesto en pausa la fabricación de sus modelos híbridos enchufables que se producen en Ingolstadt, el A4 y A5 desde el 7 al 11 de marzo, mientras que en Neckarsulm pondrá un alto al ensamblado de los A6 y A7 entre el 7 y el 18 de este mismo mes. Audi confirmó mediante un correo que es probable que ocurran nuevas pausas si el conflicto sigue escalando.
La situación actual en Europa provocada por Rusia ha traído consigo una serie de problemas en las cadenas de suministros, afectando la falta de stock de arneses de cableado que se usan para ordenar los cientos de cables que permiten que un vehículo moderno pueda operar. El suministrador de dichos componentes está ubicado al oeste de Ucrania y ha debido cortar la producción por la guerra.
“Debido a la alta demanda, así como a algunas restricciones causadas por la situación del suministro, el volumen de producción actual ya está agotado para los modelos Audi híbridos enchufables para 2022”, señaló un portavoz de la compañía.
Pero no solo Audi ha sentido los coletazos de la guerra, dentro del mismo Grupo Volkswagen, Porsche y la propia VW están bajando la producción alemana. Por su parte, el Grupo BMW detendrá sus operaciones en sus plantas alemanas de Múnich y Dingolfing, y la de Oxford, en Reino Unido.