Tesla inicia las entregas de sus primeros autos fabricados en Alemania

El empresario Elon Musk fue ovacionado esta jornada en Alemania al supervisar la entrega de las primeras unidades de vehículos Tesla construidos en la nueva gigafáfrica de la compañía levantada en la localidad germana de Gruenheide.

La ceremonia marcó además la puesta en marcha oficial de estas modernas instalaciones europeas tras más de ocho meses de retraso y años después de que se anunciara por primera vez.

Durante el evento, donde una treintena de familias recibieron los primeros modelos de la planta, Elon Musk dijo que “este es un gran día para la fábrica" y calificó la puesta en marcha de estas instalaciones como"otro paso en la dirección de un futuro sostenible".

Pese a ello grupos ambientalistas protestaron en las inmediaciones de la planta y bloquearon su entrada con pancartas que acusaban el elevado uso de agua que presenta la gigafábrica, lo que podría dañar el entorno.

Aunque el canciller alemán Olaf Scholz, quien también asistió al evento, elogió la gigafábrica como el futuro de la industria automotriz, se enfrentó a la oposición y algunos activistas ambientales bloquearon la entrada de la fábrica mientras mostraban pancartas que señalaban su alto uso de agua.

Musk esperaba comenzar la producción de la fábrica a mediados del año pasado, pero los retrasos en la concesión de licencias y las preocupaciones locales sobre el impacto ambiental de la planta retrasaron el proceso.

Tesla se vio obligada a atender pedidos europeos desde Shanghái mientras esperaba su licencia alemana, lo que se sumó a los crecientes costos de logística en un momento en que luchaba con la escasez de chips en toda la industria y otras interrupciones en la cadena de suministro.

Las cosas mejoraron el pasado 4 de marzo cuando la compañía recibió el visto bueno final de las autoridades locales para comenzar la producción bajo un estricto cumplimiento de condiciones que van desde el cuidado en el uso del agua hasta los controles de contaminación del aire.

Las nuevas instalaciones implican la creación de 12 mil nuevos puestos de trabajo, 3.500 de los cuales ya están contratados.

A plena capacidad, la planta producirá 500.000 automóviles al año, más que los 450.000 vehículos eléctricos a batería que el rival alemán Volkswagen vendió a nivel mundial en 2021.

También generará 50 gigavatios hora (GWh) de energía de batería, superando a todas las demás plantas de Alemania.