El fabricante estadounidense General Motors anunció que debido a la escasez mundial de microchips deberá detener la producción de camionetas en su planta de Ft. Wayne, Indiana, por un periodo mínimo de dos semanas.
La medida se aplicará durante el próximo mes de abril y se suma al conjunto de restricciones que ha debido adoptar la industria para hacer frente a la escasez de microchips de computadora originada a fines de 2020 como resultado de los cambios experimentados en los hábitos de consumo de las personas producto de la pandemia.
De hecho, General Motors aseguró que el suministro de chips ha mejorado durante los primeros tres meses de este año en comparación con igual periodo de 2021. No obstante, el problema se mantiene así como la incertidumbre de poder conseguir los suministros necesarios con sus fabricantes.
La planta de Wayne emplea a más de 4 mil trabajadores y estará cerrada las semanas del 4 y 11 de abril. Por el momento, sigue operando en tres turnos por día en la producción de camionetas pickup de trabajo ligero como la Chevrolet Silverado y la GMC Sierra.
"Todavía hay incertidumbre e imprevisibilidad en la base de suministro de semiconductores, y estamos trabajando activamente con nuestros proveedores para mitigar posibles problemas en el futuro", dijo en un comunicado General Motors.
Todas las plantas de ensamblaje de GM en América del Norte han estado operando en al menos un turno desde el 1 de noviembre del año pasado, añadió la compañía.
En los momentos más complicados, agregó, la la empresa decidió enviar toda su reserva de semiconductores a las fábricas de camionetas y SUV grandes. Esos son los vehículos más rentables de la marca.
A principios de esta semana, el presidente de GM, Mark Reuss, dijo que confía en que la compañía pueda superar las dificultades de la cadena de suministro, incluidos los chips y la posible escasez de metales de tierras raras provocada por la invasión rusa de Ucrania.
"No somos un fabricante nuevo de automóviles. Tenemos mucho volumen, muchas asociaciones. Tenemos más de 20.000 proveedores, $88 mil millones de material que utilizamos en esa cadena para fabricar nuestros autos, camionetas y crossovers", dijo el alto ejecutivo.
"No somos nuevos en este juego. Trabajamos en él todos los días y nunca termina", sentenció.