Curry enfrentó a Damian Lillard, uno de los rivales de posición directos de la super estrella
AFP
El base estrella de los Warriors,
Stephen Curry, estaba siendo el centro de las críticas luego del negativo comienzo de temporada. Tras perder contra los Blazers de visita el sábado, ayer domingo los recibieron en casa y el único MVP unánime de la historia respondió de la mejor forma que sabe hacer, anotando.
Consiguió 62 puntos en 36 minutos, encestando 8 triples con un 50% de efectividad y casi perfecto en tiros libres con 18/19, en la victoria 137-122 que coloca a su equipo en un balance de 3 victorias y 3 derrotas.
Stephen es experto en conseguir récords, siendo considerado por muchos como el mejor triplista de la historia, liderando la liga en varias estadísticas al respecto. Esta vez consiguió su marca personal de 62 puntos, superando los 54 que anotó en 2013 frente a los New York Knicks.
Un respiro después de cinco partidos en donde un equipo previsto como candidato al título no estaba mostrando un buen nivel de juego y su principal estandarte no podía brillar como en temporadas pasadas. Después de su especial partido, opinó sobre el mal momento que estaba sufriendo su equipo y los constantes comentarios en su contra.
"Cuando tienes algo por lo que estar emocionado, alimentas tu propia energía. Los más grandes aprenden a bloquear a los críticos y abrazar las expectativas", comentó.
Todo esto después de la baja para toda la temporada de uno de sus mejores jugadores, Klay Thompson, luego de romperse el talón de aquiles durante la pretemporada, y un Draymond Green que en sus primeros dos partidos no ha sabido ser relevante.
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