"El Manchester United intentó forzar mi salida. No sólo el entrenador, sino también el resto de personas que rodean al club. Me sentí traicionado".
Una de las tantas frases de Cristiano Ronaldo en su entrevista más explosiva. Apuntó contra el club, el técnico y sus críticos.
"No le tengo respeto porque no me muestra respeto. Si no me respeta, nunca le voy a respeta", lanzó sobre el entrenador Erik Ten Hag.
Las declaraciones de Cristiano golpearon fuerte la interna de los "Diablos Rojos" y la directiva ya planea sanciones. Y una sería drástica: No volvería a jugar más con el equipo inglés.
Según el diario Telegraph, Ten Hag está presionando al club para que castigue al delantero portugués y la sanción sería que no vuelva a vestir la camiseta del United.
Esa determinación va de la mano con lo que pensaría el mismo Cristiano. Distintas versiones apuntan a que lanzó todos los dardos sabiendo que tras el Mundial no volverá al cuadro de Manchester.
Como la cita planetaria acaba a mediados de diciembre, el luso esperaría hasta que se abra el mercado en enero para fichar por algún club. Es prácticamente un hecho que su relación con el United ya está totalmente rota.