SANTIAGO.- "No podemos permanecer en silencio y permitir que este hombre que agredió sexualmente a niñas pequeñas disfrute de fama, reconocimiento o un lugar honrado en la historia", expresó la artista Marianne Barnard en una petición para expulsar a
Roman Polanski de la Academia de las Artes Cinematográficas, tal como ocurrió con el productor
Harvey Weinstein.
Banard narró los abusos de los que fue víctima por parte del productor, en el año
1975. Según sus dichos, el cineasta le realizaba una sesión de fotos en bikini en una playa en California y cuando su madre se distrajo, abusó sexualmente de ella. Acto seguido, Banard realizó la denuncia en la Policía de Los Angeles.
El director de "El bebé de Rosemary" y "El pianista", logró zafar una vez más del peso de la Justicia. Esto, porque hoy la Fiscalía anunció que no presentaría cargos contra el cineasta puesto que el caso ya prescribió.
Esta hubiese sido una buena oportunidad para que la Justicia estadounidense pidiera la extradición de Polanski, quien huyó en 1978 tras ser declarado culpable de la violación de una niña de 13 años.