El abogado que representa a la familia de la menor.
Agencia Uno
SANTIAGO.- La ex directora del Servicio Nacional de Menores (Sename) Marcela Labraña debía declarar ante la Fiscalía Centro Norte en calidad de imputada, en el marco de la investigación de la muerte de niños y adolescentes al interior de la institución, pero finalmente no se concretó la instancia, porque usó su derecho a guardar silencio.
Ante esta situación, Sebastian Lafaurie, el abogado defensor de la familia de Lissette Villa, menor que tras su fallecimiento destapó el debate sobre los abusos al interior del servicio, afirmó que Labraña debe hacerse cargo de su responsabilidad en estas causas.
"Hemos podido descubrir en las declaraciones de testigos claves del caso que ella sí estaba al tanto de las contenciones que se le aplicaron a Lissette ese día, y que parte de la responsabilidad de su muerte se le atribuía a terceros, a sus cuidadoras", aseguró Lafaurie.
En ese sentido, llamó a la ex autoridad de la institución a ser clara con la información manejaba tras el fallecimiento de Lissette.
"Es importante que ella pueda decir cuál fue su rol respecto a la información que se le entregó al Servicio Médico Legal, en particular al ex director Patricio Bustos y a la ex ministra de Justicia Javiera Blanco", manifestó el abogado.
Luego del descenso de la menor en abril de 2016, Labraña comunicó a la prensa que murió luego de que un familiar no la fuera a visitar, lo que la descompensó.
