SANTIAGO.- La eventual caducidad de la concesión de Essal no generaría gran impacto para su controlador, Aguas Andinas, pero si afectaría a su dueña, Suez, firma que podría ver truncado su interés en la venta de Aguas Antofagasta y en la licitación de una desaladora para abastecer a Codelco Distrito Norte.