SANTIAGO.- Ya en poder de la Corte Suprema se encuentra la petición de extradición realizada por el Gobierno de Francia en el caso del chileno acusado en dicho país por asesinar a su ex pareja en 2016.
El documento, de 85 páginas, enviado el 15 de noviembre y recibido por Cancillería el 2 de diciembre, es "por el cargo de asesinato de la señorita Narumi Kurosaki".
El caso en cuestión remonta a la noche del 4 y 5 de diciembre de 2016, cuando la joven, de nacionalidad japonesa que tenía entonces 21 años y vivía en una habitación de la ciudad universitaria de Besançon, desapareció. A la fecha, su cuerpo aún no ha sido encontrado.
Ya el 15 de ese mes, la desaparición se comunicó de parte de la universidad, mientras que el fiscal a cargo de la indagatoria, Etienne Manteaux, viajó a Chile en abril para participar en el nuevo interrogatorio que realizó la fiscalía Centro Norte a Zepeda. El joven, sin embargo, prefirió no declarar.
Ante el caso, el ministro instructor, Jorge Dahm citó para el próximo jueves 12 de diciembre la audiencia donde se notificará formalmente de la petición y donde también se podría dictar una medida cautelar.
El caso, según la fiscalía francesa
De acuerdo al expediente que hizo llegar la fiscalía francesa, la última persona que la vio a Kurosaki fue ex pareja, Nicolás Zepeda (28), y que fue este quien la asesinó en la residencia de la víctima.
Los antecedentes del caso detallan que, si bien nadie más tuvo contacto con Kurosaki desde el 5 de diciembre, su familia y novio francés recibieron mensajes que parecían ser enviados por ella hasta el 12 de diciembre.
Por su parte, este último indicó a la policía que, por diversas razones, los mensajes no parecían provenir de la joven, "sino de otra persona que se hacía pasar por ella".
"A.D.P., que estaba en relación con la familia de Narumi KUROSAKI en Japón, explicaba que tenían sospechas en cuanto a la implicación del ex novio de Narumi KUROSAKI, Nicolas Humberto ZEPEDA CONTRERAS que describían como muy acosador y posesivo", señala el expediente que además agrega que, de acuerdo a lo constatado, el chileno estuvo en el país desde el 30 de noviembre al 7 de diciembre de 2016.
También, que Zepeda compró el 1 de diciembre detergente, combustible líquido, una caja de fósforos, y que había sido visto en la residencia estudiantil.
Evidencia también relata que ambos estuvieron juntos ese 4 de diciembre por la noche, que volvieron a la residencia y que cerca de las 2:15 del 5 de diciembre "algunos estudiantes escucharon gritos seguidos de alaridos espantosos".
La fiscalía detalló que el vehículo que había arrendado Zepeda siguió estacionado en el lugar hasta el 7 de diciembre, y que ya el 12 de ese mes viajó a Suiza, luego Madrid y luego Santiago de Chile. Nunca en compañía de la desaparecida.
"La información judicial, inicialmente abierta por los cargos de rapto y secuestro, era ampliada a lo hechos de asesinato", se añade.
Tras revisar la habitación de la joven, los investigadores encontraron su único abrigo de inverno, todos sus zapatos, tarjeta bancaria y dinero en efectivo, descartando que Kurosaki hubiese dejado la residencia "voluntariamente, en pleno invierno".
En el lugar solo faltaba una maleta y la frazada de la cama. Se encontraron huellas de Zepeda en una taza, un cuchillo, una camiseta, una botella de agua, una pared y en el baño.
También se informó que un amigo y pareja tenían planes luego del 7 de diciembre, los que nunca ella llamó para cancelar.
La versión de Zepeda y la declaración de su primo
Ya el 30 de diciembre de ese mes, Zepeda indicó a autoridades chilenas que a Ginebra viajó para "proseguir sus estudios post universitarios", y que mientras estaba en escala en Madir, el 29 de noviembre, recibió un mensaje de Kurosaki, en que esta le señalaba lamentar haberlo conocido.
El chileno señaló que ante ello viajó a Francia para "un intercambio amitoso", que la vió el 4 de diciembre, que ambos se dieron cuenta "que seguíamos enamorados". Sin embargo, añadió, la joven habría sentido culpa, pidiéndole que se fuera al día siguiente. "Esperé que Narumi me contactara, pero nunca lo hizo", concluyó.
Uno de los testimonios que recopiló la fiscalía francesa fue del primo del chileno, quien lo recibió en Barcelona.
El pariente, estudiante de medicina, señaló que el 10 de diciembre de 2016, Zepeda se había mostrado interesado por los temas médicos relativos a la muerte por asfixia , preguntándole lo que había que hacer "cuando alguien se había ahorcado", o "por qué muere una persona que se ha ahorcado". También "cuanto tiempo dura para morir", "cómo se sabía, después de una horca si la persona estaba viva o muerta".
Indicó también haber quedado sorprendido cuando su primo le dijo: "A veces cuando uno dispone de mucha información es una gran responsabilidad", y que, en una oportunidad, Zepeda habló de Kurosaki en pasado, diciendo: "A Narumi le gustaba mucho el mar".
