En el marco de su participación en el Foro Internacional Vocento Chile-España, el Presidente
Sebastián Piñera reconoció este jueves que el proceso constitucional en nuestro país, implica "riesgos y oportunidades", pero expresó confianza en que se dejarán fuera a "los extremistas" y que la Constitución será el resultado de grandes acuerdos.
Según manifestó el Mandatario, "por supuesto que cuando un país acuerda una Convención Constitucional en que 155 delegados, constituyentes, elegidos por la ciudadanía, van a tener la responsabilidad de proponenle al país, porque después tiene que ser Plebiscitado, una nueva Constitución es una época de riesgos, pero también es una época de oportunidades".
"Los pesimistas se quejan, los optimistas esperan que los tiempos mejoren, pero los que estamos a cargo tenemos que preocuparnos para que los tiempos sean mejores. Por eso yo tengo con fianza de que este proceso constituyente nos va a llevar a un buen puerto, un buen puerto es una Constitución respetada, legitimada, aceptada por todos", sostuvo.
"La Constitución que tenemos hasta el día de hoy surge durante el gobierno militar de 1980, desde entonces ha sido permanentemente el centro del debate (...) cuando el Congreso aprobó la reforma constitucional que abre las puertas a esta asamblea constituyente, estableció que los acuerdos van a ser por 2/3, es decir van a requerir un gran consenso, un gran acuerdo", apuntó.
Y agregó que "yo tengo confianza de que en Chile vamos a ser capaces de dejar afuera los extremistas de ambos lados, que muchas veces no respetan ni el Estado de Derecho, ni la democracia, ni las libertades ni valores que son esenciales y que yo siento viven en el alma del pueblo chileno".
"Por eso que estamos conscientes que hay riesgos, pero tenemos confianza en la sabiduría, el buen criterio del pueblo chileno", recalcó.
Junto con dar cuenta de las principios que espera estén en la nueva Constitución, indicó que "por supuesto que hay extremos y en España los conocen muy bien, a veces también hay extremismos de derecha y también en España los conocen muy bien, que tienen visiones distintas, por eso que hay riesgos, hay riesgo, pero yo tengo confianza en que esos valores esenciales que son los que dan sentido, proyección, estabilidad, para que los países puedan desarrollarse en plenitud, van a estar recogidos en la nueva Constitución de nuestro país".
Además, Piñera planteó el concepto de la "libertad" en diferentes ámbitos, como parte esencial de la nueva Carta Fundamental.
Piñera destacó que "ahora vamos a tener que pasar por este test democrático, a pesar de que estoy consciente de los riesgos, escucho y leo lo que plantean algunos sectores extremistas que quieren terminar con todos los valores y principios y quieren imponer una utopía que no ha resultado en ninguna parte del mundo y donde se ha implementado ha sido un desastre que ha afectado la libertad, el desarrollo y la dignidad de las personas, eso no lo queremos para Chile".
"Pero más allá de que veo los riesgos, yo tengo mucha confianza, esta Constitución tiene que aprobarse por 2/3 de los constituyentes y por tanto, va a requerir un gran acuerdo", acotó, añadiendo que Chile "siempre ha demostrado capacidad" de encontrar los grandes acuerdos. Por lo que cree que no se logrará la "transición" desde la actual Constitución, hacia un gran pacto o acuerdo social.
Próximo Gobierno
Consultado respecto al próximo gobierno que lo sucederá, Piñera planteó que si bien la ciudadanía decidirá, "yo tengo confianza en que nuestras ideas, nuestro sector, nuestro proyecto de país, es un proyecto de progreso, con libertad, con equidad, con igualdad de oportunidades, va a permanecer".
"Por eso yo tengo confianza de que el próximo Presidente de Chile va a ser parte de nuestra coalición", enfatizó, ya sea "hombre o mujer".
Por otra parte, Piñera también se refirió al conflicto indígena, así aseveró que "haría una clara distinción entre el pueblo mapuche, que es pacífico, amante de la paz, que es un pueblo que siempre ha hecho un enorme aporte, que tiene demandas e inquietudes, de progreso, de reconocimiento de su cultura (...) de lo que son grupos violentistas, terroristas, narcotraficantes".
"El pueblo mapuche no es un pueblo narcoraficante, no es un pueblo terroristas, y habita nuestro país desde antes que llegaran los españoles", precisó, a la vez que dijo que distingue las legítimas demandas de la causa mapuche de la violencia.