El ministro vocero de Gobierno,
Jaime Bellolio, expresó su rechazo luego de que se conociera que el presidente de la
Clínica Las Condes (CLC),
Alejandro Gil, fue vacunado con una
tercera dosis de Pfizer sin tener autorización para hacerlo. Según los antecedentes que se manejan, ya había completado su esquema de vacunación con Sinovac.
Por este caso, la Seremi de Salud de la Región Metropolitana inició un sumario sanitario en contra del recinto asistencial, para determinar eventuales responsabilidades.
"Lo que nosotros tenemos como información por parte de la Seremi de Salud es que la Clínica Las Condes notificó al Programa Nacional de Inmunizaciones que había una persona que había recibido una tercera dosis de la vacuna Pfizer. Y por lo mismo es que se instruyó y se concurrió al establecimiento para hacer una investigación sumaria. ¿Por qué? Porque en nuestro país nadie se puede saltar la fila en esta materia", señaló Bellolio.
El secretario de Estado recalcó que "existe un calendario" de vacunación, y que "ese calendario ha sido definido por la autoridad, lo ha permitido que más de 12 millones de personas estén vacunadas con una dosis y que tengamos una cobertura muy importante de personas con más de dos dosis -el 72% de la población adulta-".
"Estamos vacunando hoy día ya a jóvenes que tienen 16 años y vamos a continuar haciendo eso hasta jóvenes de 12 años. Y luego, por supuesto que estamos esperando todavía mayor evidencia científica, a ver si es necesario hacer el proceso de vacunación en niños y niñas así como también una eventual tercera dosis", complementó Bellolio.
No obstante, zanjó: "Pero eso no es una instrucción que pueda hacer unilateralmente una clínica y menos una persona. Y por lo mismo es que corresponde una investigación sumaria para ver eventualmente determinar las responsabilidades y por supuesto que ocurran las sanciones por incumplir las normativas sanitarias, en este caso de las inmunizaciones".
Según informó La Segunda, la inoculación habría ocurrido el sábado, luego que Gil se presentara en el vacunatorio de CLC junto a la gerenta de enfermería, Andrea Gaete, para pedir la tercera dosis. Pese a que la enfermera de turno le informó que aquello estaba fuera de protocolo, la inoculación se concretó de todas formas.
Tras el hecho, la enfermera jefa de Servicios Ambulatorios, Leticia Ortiz, reunió los antecedentes del caso junto a la coordinadora del vacunatorio, Carla Garrido, quienes enviaron un informe a la encargada del Programa Nacional de Inmunizaciones. Ayer, se confirmó la renuncia de Ortiz, quien acumulaba 15 años de experiencia en el recinto.
