En la audiencia de preparación de juicio oral contra Gerardo Leal, único acusado en el caso de la quema de la iglesia San Francisco de Borja, se fijó una fianza de $1,5 millones al imputado por "peligro de fuga", la cual fue pagada y obtuvo una rebaja de su prisión preventiva, y se le decretaron las medidas precautorias de arresto domiciliario total y arraigo nacional. No obstante, la Corte de Apelaciones de Santiago revocó la medida sin que el acusado se presentara ante tribunales, por lo que ahora figura como prófugo.
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