Para la masa: 500 gramos de harina, 4 huevos a temperatura ambiente, sal, 400 gramos de queso de cabra blando, 1/2 taza de queso parmesano rallado grueso, 300 gramos de granos de choclo, 1 manojo de ciboulette, 3 cucharadas de jerez, 3 cucharadas de aceite de oliva, pizca de nuez moscada y pimienta, 2 tazas de rúcula fresca y limpia.
Para la masa: Sobre una mesa de trabajo limpia, colocar la harina, con sal, hacer un hueco en el centro y agregar los huevos uno a uno, batiendo la mezcla con un tenedor hasta formar una masa blanda que no se pegue en los dedos, colocar dentro de un bol y taparla mientras se prepara el relleno.
Para el relleno: Calentar 1/2 litro de agua en una olla pequeña y cocinar el choclo allí por 10 minutos hasta que esté tierno. Escurrir el agua y reservar.
En una procesadora, moler juntos queso de cabra y ciboulette. Agregar jerez, aceite de oliva, pimienta y nuez moscada. Mezclar con los granos de choclo. Reservar refrigerado.
Estirar la masa muy fina, en una máquina de hacer pasta hasta llegar al punto de dejar la masa más fina. Cortar la masa en rectángulos de unos 10 por 15 centímetros como para lasaña, pasar las pastas por agua hirviendo por 2 minutos, escurrir cada pieza y rellenar con la mezcla de queso y choclo formando los canelloni. Colocar los canelloni en una fuente tipo pirex, bañar con un poco de aceite de oliva extra, colocar algunas hojas de rúcula por encima y finalmente, espolvorear con el queso parmesano rallado.
Hornear a 180°C por 6 a 8 minutos y servir, colocando sobre cada plato un puñadito de rúcula fresca extra.
Nota: puede reemplazar la masa hecha en casa por masa de lasaña fresca o seca comprada.
