PARIS.- El francés Sebastién Grosjean, único sobreviviente local en Roland garros, se recompuso de un desastroso comienzo para terminar arrollando por 1-6, 6-1, 6-1 y 6-3 al veterano estadounidense Andre Agassi (N. 3), en el último partido de cuartos de final del Abierto parisino.
El local, que parecía no poder creer lo que estaba viviendo, afirmó: "el partido empezó mal para mí, me impuso mucha presión, pero, cuando comencé a sentir el apoyo del público detrás mío, me puse más agresivo y encontré más posibilidades en mi juego".
Agassi tuvo en la cancha el apoyo del ex Presidente Bill Clinton, quien curiosamente nunca vio ganar en el juego a su compatriota. Tanto a los espectadores como a los periodistas no les pasó inadvertido un detalle anecdótico: Bill Clinton llegó en el descanso después del primer set, y su compatriota perdió los dos siguientes por 6-1. Cuando Clinton fue a tomar un refresco, ganó Agassi dos juegos; pero a su vuelta a la pista, Grosjean volvió a hacer otro parcial de 6-1 para un resultado final de 6-3.
"Si quiere venir Clinton a las semifinales, yo le invito", diría luego con humor el francés. A Agassi, en cambio, no le sobraban las garnas de hacer bromas después de que resultara frustrado su intento de conseguir este año el Gran Slam, tras vencer en enero en Australia.
"Con Alex será, seguramente, un encuentro de la misma envergadura. Corretja es un especialista de la tierra batida. Pero, hasta mañana no voy a pensar en la semifinal", dijo Grosjean.
Por su parte, Corretja, que elimnó en sets corridos al suizo Roger Federer, señaló que "ya le veía posibilidades antes del partido con Agassi. Es un jugador joven y agresivo, que está muy motivado jugando en casa. Es rápido, tiene una buena derecha que pega con peligro en carrera, y de revés falla muy poco. Además, saca bien para su altura. Será un partido a muerte. Tendré que moverle lo que pueda, desgastarle".
