MADRID.- El Liverpool, que derrotó por 1-0 al Bayer Leverkusen, completó la fiesta inglesa en los partidos de ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones, en los que el Barcelona, derrotado en el campo del Panathinaikos griego (1-0), terminó por poner en entredicho la supremacía española en la competición.
El Barcelona, frente al que se supone el rival más débil, se unió al Real Madrid y al Deportivo, derrotados ayer por el Bayern Múnich (2-1) y el Manchester United (0-2) para completar el desastre español, que pese a ser el único país con tres representantes, ha comprometido su presencia en las semifinales.
Un gol de penal de Anggelos Basinas, en el minuto 79, dio al Panathinaikos la victoria frente a un equipo que, sin Rivaldo o con él, en el último cuarto de hora, no supo crear peligro a un conjunto más voluntarioso que potente.
En el otro partido de los cuartos final disputado hoy, el Liverpool sacó una ventaja mínima pero que puede ser suficiente para un conjunto acostumbrado a gestionar resultados cortos.
Fue un defensa, el central finlandés Sammi Hyppia, el que logró el único tanto del partido, tras aprovechar un pase de Michael Owen, a la salida de un saque de esquina.
Los partidos de vuelta se disputarán el 9 de abril.
