SANTIAGO/NUEVA YORK.- No le salió nada en el primer set. Y su rival, las hacía todas. El chileno Marcelo Ríos (22° de la ATP) daba un paso en falso ante el sueco Jonas Bjorkman (48°) en su objetivo de avanzar a la segunda ronda del US Open.
Pero el "Chino" cambió el switch a buena hora y no se preocupó de liquidar rápido los puntos. Trabajó -y duro- para quedarse con el triunfo por 1-6, 6-2, 6-4 y 6-1 tras dos horas de juego.
Los números son elocuentes a la hora de analizar el cambio que debió imprimirle Ríos a su juego para derrotar a su rival. En la primera manga cometió 11 errores no forzados, de un total de 29; apenas colocó 5 tiros ganadores, de un total de 34; y su primer servicio entró en el rectángulo en apenas un 45 por ciento (9 de 20), mientras que en el partido bordeó el 60 por ciento.
También el chileno cambió la historia con los puntos de quiebre que tuvo a su favor, ya que de los dos no aprovechados en la primera manga, luego convirtió siete de doce.
En cambio, el escandinavo fue de más a menos. Si bien su primer servicio siguió funcionando y su juego en la red no sufrió mayores cambios en su positiva efectividad, con el avanzar de los juegos se encontró con un Ríos con más movilidad y concentrado en jugar más que en liquidar. Y ahí se acabaron sus oportunidades.
En segunda ronda, el chileno se enfrentará con otro sueco, Robin Soderling (231°), que superó en tres sets al alemán Lars Burgsmuller (81°) con parciales de 7-6(7), 6-0 y 6-4.