MADRID.- Germán Burgos, portero argentino del Atlético de Madrid, se entrenó hoy por primera vez junto al resto de sus compañeros un mes después de la extirpación de un tumor maligno localizado en el riñón izquierdo.
El guardameta, conocido popularmente como "El Mono", se ejercitó de forma muy suave durante poco más de media hora y se le vio con el mismo humor de siempre. De hecho, apareció con un llamativo pelo teñido de una original combinación de rojo y negro.
Se espera que en unas tres semanas, Burgos pueda estar a disposición del español Luis Aragonés, técnico del Atlético, para afrontar la última y decisiva parte del tramo de la temporada, en la que el equipo rojiblanco opta a conseguir una de las plazas que da derecho a disputar una competición europea.
