PERTH, Australia.- El noruego Petter Solberg (Subaru Impreza) ha arrebatado la victoria final en el Rally de Australia al francés Sebastien Loeb (Citroen Xsara), mientras que el español Carlos Sainz, también de Citroen, se tuvo que conformar con la quinta plaza.
Después de disputarse diez pruebas del Mundial, el inglés Richard Burns (Peugeot 206), que fue tercero en Australia, continúa al frente de la clasificación general del campeonato con 55 puntos, seguido de Solberg, que se sitúa segundo, y de Sainz, ambos con 48 puntos.
La lucha cerrada que han mantenido durante todo el rally tanto Solberg como Loeb, no ha defraudado a los aficionados australianos que se han dado cita para presenciar las cuatro últimas especiales, en donde la emoción ha estado presente hasta el final.
Además, el piloto estonio de Ford, Markko Martin, vencedor de los dos tramos finales de la segunda etapa y que amenazaba el tercer puesto de Burns del que le separaban 30 segundos, fue descalificado por utilizar una piedra para inmovilizar la rueda de recambio de su coche tras romper las correas que la sujetaban.
Los jueces consideraron que la piedra de 5 kilos era un elemento no autorizado que modificaba el peso del Ford Focus y apartaron a Martin de la carrera.
Los pronósticos meteorológicos que amenazaban lluvia para la última jornada se cumplieron y, tal y como avanzó Carlos Sainz en la víspera, la carrera cambió por completo.
Los cinco segundos de ventaja con que partía Loeb al término de la segunda etapa se esfumaron en el primer tramo cronometrado, disputado en Bannister Nort y con 24,81 kilómetros de recorrido.
Allí, Solberg fue el más rápido con 5,7 segundos de ventaja sobre Loeb, mientras que Sainz, tercero al ceder 6,6 segundos, superaba al finlandés Tommi Makinen (Subaru Impreza) y amenazaba a su compañero de equipo el escocés Colin McRae en busca del cuarto puesto.
Loeb, rectificó su mala elección de neumáticos en el primer tramo de la jornada y recuperó el liderato en el siguiente en el que se impuso con 1,7 segundos sobre el piloto noruego. Por detrás, Burns hacía "su carrera" sin agobios y mantenía la tercera plaza con suficiencia, al mismo tiempo que Sainz dejaba su duelo con McRae en apenas dos segundos.
Tras el paréntesis y la reunificación en el Parque de asistencia, Solberg sentenció el Rally. En los 24,69 kilómetros de que constaba la especial el piloto de Subaru "voló" literalmente y logró el mejor tiempo con 9,3 segundos de ventaja sobre Loeb que tan sólo pudo ser quinto.
Por delante del francés se situaron sus compañeros de equipo, McRae y Sainz, enzarzados en una batalla particular, y el finlandés Makinen, mientras que Burns se limitaba a asegurar los puntos que le permitirían seguir al frente de la clasificación del Mundial.
La última especial fue un recital de Citroen, que situó a dos de sus pilotos en lo más alto, aunque fue el escocés McRae el que se impuso por delante de Sainz por 4 segundos, mientras que Solberg era tercero a 10,9 y Loeb no pasaba del octavo puesto a casi medio minuto.
El noruego de Subaru, de 29 años, lograba así su tercera victoria en un rally del Mundial tras debutar en 1998. En 2002 se impuso en Gran Bretaña y esta temporada fue el mejor en Chipre.
En la clasificación general de pilotos, Burns aumenta su ventaja sobre sus perseguidores y suma 55 puntos. Por detrás, Solberg arrebata la segunda plaza a Sainz, con quien empata a 48 puntos, aunque el noruego tiene más victorias que el español en la presente campaña.
El francés Loeb sube hasta la cuarta plaza con 45 puntos y el finlandés Marcus Gronholm, actual campeón del mundo y que no puntuó en Australia al retirarse en la primera etapa, es quinto con 38.
En el Mundial de constructores, Citroen se ha situado por delante de Peugeot (ambos con 110 puntos) a la espera de los tres próximos rallys (San Remo, Córcega y Catalunya) que se disputarán sobre asfalto.