MANIZALES- El Once Caldas de Colombia venció anoche como local por 2-1 al aguerrido Atlético Maracaibo de Venezuela en un partido válido por el Grupo 2, y aseguró su paso a la segunda fase de la Copa Libertadores.
Elkin Soto (34’) y Arnulfo Valentierra (78’) anotaron por el Caldas, mientras que Mariano Martínez (32’) marcó el gol del visitante, que deberá derrotar el próximo 22 de abril a Vélez Sarsfield de Argentina si quiere continuar en el torneo.
Con este resultado, el Caldas (que por momentos se vio opacado por el juego ordenado de su rival) acumula 12 puntos y clasifica como primero del grupo, seguido por Vélez (7), Maracaibo (5) y Fénix (4).
En la primera etapa, Maracaibo salió al estadio Palogrande con la intención de convertirse en el dueño del balón y de arrinconar a los locales, que se defendían hábilmente y ensayaban ataques, aunque ninguno de los conjuntos creaba opciones de peligro.
Tras varios minutos en los que el visitante controlaba las acciones, el equipo albo comenzó a mover sus laterales y a pisar con fuerza en el área que defendía Rafael Dudamel, quien en distintos pasajes logró salvar al Maracaibo.
En el minuto 32, el delantero Mariano Martínez se encargó de anotar el único tanto de los "patriotas", gracias a una rápida jugada de contraataque que dejó desubicada a la defensa de los colombianos.
La desventaja no apagó los ánimos de los dueños de casa y, al contrario, intensificó el mano a mano que protagonizaban Caldas y Maracaibo, que había caído por 2-1 como local en el cotejo de ida frente a los cafeteros.
La escuadra blanca apagó la celebración de los venezolanos al empatar dos minutos después de inaugurado el marcador, con un puntillazo de Elkin Soto, quien concretó un certero pase del centrocampista Arnulfo Valentierra.
Después del descanso, Maracaibo salió a apretar al Caldas, en su intento por ratificar su buena racha como visitante, con un empate ante Vélez por 1-1 y la derrota que le propinó al Fénix por 2-1. El equipo venezolano buscaba una victoria que le permitiera asegurarse el segundo puesto en su cuadrilla en la Libertadores, con miras a clasificar a la siguiente etapa en este certamen.
Pero el local no estaba dispuesto a ceder, y así lo demostró Elkin Soto con un zapatazo de media distancia que exigió a Dudamel poco después del descanso, situación que se repitió al minuto 76, con un tiro de Jhon Viáfara que se estrelló contra el arco venezolano.
Las aspiraciones de Maracaibo las apagó Valentierra con un tiro de pelota quieta con el que prácticamente selló desde el minuto 33 el final del partido, que dirigió el árbitro chileno Pablo Pozo, acompañado de sus compatriotas Eduardo Ponce y Rodrigo González.
