Marcelo Espina jugará su último partido ante la UC en el estadio Monumental.
SANTIAGO.- El mediocampista y capitán de Colo Colo, Marcelo Espina, comunicó este mediodía su decisión indeclinable de dar término a su carrera como jugador de fútbol profesional.
La decisión la dio a conocer en una conferencia de prensa, en la que estuvo acompañado por el todavía entrenador de Colo Colo, Jaime Pizarro; el gerente del club, Raúl Tessada; el síndico Patricio Jamarne, y franqueados por el plantel en pleno de los albos.
Espina comunicó su anuncio lo más formal que pudo: "El motivo de esta conferencia es para comunicar mi decisión de dejar el fútbol profesional", fueron sus primeras palabras, explicando además que cumplía con el compromiso de comunicarla dos semanas antes de jugar su último partido, que será el 4 de julio ante la Universidad Católica en el Estadio Monumental.
"No ha sido fácil para mí esta decisión -continuó. Creo que este es el momento oportuno, durante 18 años estuve en alta competencia. He pasado muchos momentos felices. Siento que ya es tiempo de disfrutar de las cosas que he dejado de lado, con mi familia", explicó el volante argentino.
"Quiero dejar el mejor de los recuerdos. Espero que entiendan y compartan esta decisión que no ha sido sencilla, pero si estudiada y pensada", declaró en medio del silencio de la sala.
En ese momento respira y se frota los ojos: Marcelo Espina está llorando pero prosigue con los agradecimientos: "A mis padres que si no hubiera sido por ellos..." y el llanto no lo puede contener. "...si no hubiese sido por ellos -retoma- no habría podido llegar a primera división".
"A mi señora Sandra y a mis hijos, a quienes no les he dado el tiempo. Los he llevado de un país a otro. Ellos me han dado la fuerza para llevar esta labor de la forma más profesional posible".
Recuerda al club Atlético Plantense y agradece a los que lo trajeron a Colo Colo en 1995 y el 2000, a los dirigentes, a los empleados del club, a los periodistas, a los entrenadores, a los árbitros, "a los hinchas de los otros equipos que a pesar de la rivalidad me han respetado como jugador y persona", dijo.
"A los hinchas de Colo Colo, que me han cobijado como si hubiera nacido en este país". A esta altura, lloran también sus compañeros de equipo, Miguel Ramírez, Juan Pablo Úbeda y Mauricio Donoso.
Ante la posible partida de Jaime Pizarro, se ha abierto la posibilidad para que Espina retorne a Colo Colo como técnico a partir de la temporada 2005, ya que el volante está pronto a terminar el curso de entrenador en el Instituto Nacional del Fútbol (INAF).
La carrera del capitán albo
Marcelo Fabián Espina debutó el 28 de septiembre de 1986 por Platense, jugando frente a Rosario Central, cuando tenía apenas 17 años. En el elenco "Calamar" se convirtió en ídolo, defendiendo la camiseta entre 1987 y 1990, para luego completar una segunda etapa entre 1990 y 1994.
Fueron 180 partidos y 45 goles en la camiseta que lo vio nacer, llegando incluso a convertirse en el máximo anotador del Torneo Clausura 1994, con 11 conquistas, junto a Hernán Crespo.
Tras su primer periodo en Platense, Espina migró al Irapuato de México, donde militó en la temporada 1990/91. La siguiente campaña la cumplió en Atlante, totalizando 23 goles en toda su estadía en el fútbol azteca.
En su regreso a Argentina fichó por Lanús para la temporada 1992/93, pero sólo duró una campaña antes de retornar a Platense. Tan bueno fue su retorno que Daniel Passarella lo consideró para la Selección Argentina, debutando precisamente ante Chile en 1994. Con la albiceleste totalizó 15 partidos entre 1994 y 1996, incluyendo una participación en la Copa América de 1995.
El mediocampista llegó a Colo Colo en 1995 por una suma cercana al millón de dólares, una transacción de lujo que rápidamente le trajo provechos al equipo albo. Con el estratega paraguayo Gustavo Benítez en la banca, Espina empujó en la cancha para la conquista de la Copa Chile 1996 y el Torneo Nacional del mismo año. En 1997 se impusieron en el Torneo Clausura y el 1998 celebraron el tercer título.
La estadía de Espina en el Cacique estuvo interrumpida con su partida al Racing de Santander español, entonces dirigido por Benítez. Espina actuó la campaña 1999/2000 en España, donde jugó 35 partidos y marcó 2 goles.
En su regreso, el capitán de los albos celebró su quinto trofeo en el Torneo Clausura del 2002, con Jaime Pizarro en la banca.