SANTIAGO.- El sexteto de Universidad Católica se consagró campeón de la primera Liga Nacional de vóleibol, al superar por 3 a 0 al Universidad de Chile-Ñuñoa, en el partido final de la competencia masculina.
Después de los resultados de la fase definitoria, los cruzados necesitaban vencer por 3 a 0 ó 3 a 1 para superar por set promedio a los azules, que llegaron al último encuentro con la primera opción para campeonar, tras haber ganado sus dos partidos previos en el cuadrangular final.
Aquella presión fue el mejor aliado para los de la franja, que realizaron una faena impecable en la carpeta del Polideportivo de Ñuñoa, con un gran trabajo individual y colectivo, lo que se tradujo en una cómoda victoria, que fue expresada en parciales de 25 a 18, 25 a 14 y 25 a 21.
"Hoy funcionó todo como queríamos, ya que realizamos una gran presentación colectiva, con un gran trabajo en el bloqueo y ataque, lo que permitió el lucimiento individual de nuestras figuras. Ha sido muy importante para nosotros ganar la liga, ya que demostró ser un torneo muy fuerte y competitivo", señaló el entrenador de la UC Miguel Holtz.
"Me llevo una muy grata impresión del nivel de la competencia, ya que el equipo tuvo que trabajar mucho para levantar esta copa. Creo que instancias como esta ayudarán mucho a Chile a levantar su nivel. Ha sido una linda experiencia ganar este campeonato y reforzar un equipo como Católica, que se nota que se toma muy en serio este deporte", indicó el ex seleccionado argentino Fabián Barrionuevo.
"Esto es lo que necesitaba el vóleibol chileno: una competencia seria y de buen nivel. Creo que hoy quedó confirmado que la gente quiere ver este deporte, ya que hace mucho tiempo que no jugaba en un ambiente como el de hoy", puntualizó con la copa en la mano, el mejor armador del torneo, Andrés Cabero.