Costas Kenteris, al salir del hospital.
ATENAS.- Los velocistas griegos Costas Kenteris y Katerina Thanou, en el centro de un escándalo por dopaje, abandonaron el martes un hospital en Atenas donde estaban ingresados para mostrarse en público por primera vez en cinco días.
Los atletas han estado ingresados desde que sufrieron el pasado jueves un misterioso accidente de motocicleta, poco después de no haberse sometido a un control antidopaje en la Villa Olímpica.
"Es una gran injusticia, nunca he utilizado sustancias prohibidas", dijo Kenteris, medalla de oro en 200 metros planos en los Juegos de Sydney, a los periodistas que rodeaban su auto cuando el corredor abandonaba el hospital.
"Toda esta gente que me crucifica en la televisión es la misma gente que quiere fotografirse a mi lado después de cada éxito", añadió. "Pero después de la crucifixión llega la resurrección".
Ambos atletas debían dejar el hospital al mediodía de Atenas, pero Kenteris se marchó solo antes de las dos de la tarde y fue seguido más tarde por Thanou.
"Me encuentro muy triste y decepcionada con todo lo que se ha dicho. Esperaré a la decisión del COI mañana (miércoles) y continuaré luchando por todos aquellos que se sienten griegos", dijo Thanou, medalla de plata en 100 metros planos en Sydney. "Continuaré luchando por el país que amo", manifestó.
Ya suspendidos por los dirigentes deportivos griegos, los velocistas deberán asistir a una audiencia del COI el miércoles en la que podrían suspenderles de los Juegos y durante al menos un año.
También se enfrentan a una investigación penal dirigida por un fiscal del estado griego.
Los velocistas han dicho que volvían a la Villa Olímpica cuando sufrieron el accidente. Ningún otro vehículo se vio implicado ni hubo testigos del mismo.
Cuando abandonaron el hospital, Kenteris agradeció a sus seguidores el apoyo recibido. "Me gustaría decir a todos los miles de simpatizantes que me han querido, me siguen queriendo y me han mostrado su cariño y apoyo con cientos de cartas, llamadas, correos electrónicos y flores", dijo, antes de alejarse conduciendo.
Por otra parte, el Comité Olímpico Internacional rechazó antes una petición de Kenteris y Thanou para que se les realizara el control antidopaje en el hospital donde estaban ingresados.
"Ellos querían realizar el control antidopaje en el hospital, (creyendo) que esto jugaría en su favor", dijo el jefe de la comisión médica del COI, el sueco Arne Ljungqvist.
"No sé cuál es su estrategia, pero no caeremos en ella. No tendría ningún sentido hacerles el control en el hospital. Puedes preparar cosas allí para no tener un resultado positivo".