BUENOS AIRES.- La selección argentina de fútbol viajó hoy a Chile para jugar este miércoles frente a la de ese país sin que el entrenador José Pekerman confirmara el equipo.
Los campeones en Atenas 2004 Javier Mascherano, Carlos Tevez y Andrés D’Alessandro, que no jugaron ante Uruguay, están en condiciones de volver a ser titulares y en Argentina se descontaba que los dos primeros sustituirían a Esteban Cambiasso y Luciano Figueroa, pero Pekerman decidió mantener en reserva la alineación hasta poco antes del encuentro.
Los futbolistas argentinos coincidieron en que Chile será un rival duro mañana, especialmente porque la derrota ante Ecuador sufrida en Quito le ha dejado en una posición incómoda para aspirar a la clasificación, pese a que faltan por jugarse nueve partidos de las eliminatorias del Mundial de 2006, y saldrán al campo dispuesto a todo por la victoria.
En cambio, la actuación de los argentinos frente a Uruguay (4-2) fue lo suficientemente sólida para crear dudas sobre la necesidad que podría tener Pekerman de hacer cambios.
El entrenador sólo dialogó con la prensa tras el partido contra los uruguayos y después no ha dado señales de sus intenciones para el segundo encuentro de su ciclo.
Cambiasso, que regresó a la selección tras varios meses fuera de la convocatoria, tuvo una destacada actuación el pasado sábado, pero Mascherano se había consolidado en el puesto como titular indiscutible en la Copa América y los Juegos Olímpicos.
Tevez fue la figura del equipo en ambos torneos y en Atenas 2004 el goleador del torneo, mientras que Figueroa, que no iba a jugar contra Uruguay y apareció en el campo por la baja de Hernán Crespo, marcó dos goles ante Uruguay.
D’Alessandro admitió que el puesto en el que juega en la selección es difícil porque debe disputarlo con Juan Román Riquelme y Pablo Aimar, razón por la cual la abundancia de jugadores incita a la polémica, que en un ambiente tan futbolero como el argentino pone al seleccionador en una situación comprometida.
Los argentinos, segundos a un punto de Brasil en las eliminatorias sudamericanas, tienen la clasificación "encaminada", afirmó Marcelo Bielsa cuando hace casi un mes dimitió como seleccionador.
Pekerman tiene la misma sensación, pero como todo entrenador en su país siempre está a prueba, obligado a rendir exámenes parciales, especialmente en esta etapa de acomodamiento a su cargo.
Lo que deja tranquilo al nuevo seleccionador es que en el partido de su presentación no surgieron críticas a las individualidades que pusieran en duda su elección y distribución en el campo. Le ha ido bien de entrada y ahora siente más libertad para tomar decisiones.
