BERLIN.- El árbitro Robert Hoyzer, que está desde la semana pasada bajo sospecha de corrupción, admitió hoy la manipulación de partidos para sacar ventaja de apuestas, según informaciones del canal de noticias N 24 y del diario Bild.
Hoyzer, según esos medios, aceptó haber participado en manipulación de partidos y quiere ponerse a disposición de la fiscalía de Berlín como testigo para otras investigaciones sobre estafas en el mundo de las apuestas.
La Federación Alemana de Fútbol (DFB) había interpuesto ayer una denuncia penal en contra de Hoyzer ante la fiscalía de Berlín.
A Hoyzer se le imputa concretamente haber apostado fuertes sumas por el SC Paderborn y luego favorecer a ese equipo en el duelo de la Copa de Alemania ante el Hamburgo que el arbitró el 21 de agosto de 2004.
El Hamburgo estaba en ventaja por 2-0 y luego Hoyzer pitó dos penales, uno de ellos claramente inexistente y otro dudoso, a favor del Padeborn y expulsó al delantero hamburgués Emile Mpenza.
Al final, el partido terminó con un 4-2 a favor del Padeborn, equipo de segunda división.
Tras el partido, la agencia de apuestas Oddset informó a la DFB de que se habían registrado fuertes apuestas a favor del Padeborn -cuya victoria se pagaba por 575 a 100- lo que generó una primera investigación que no arrojó ningún resultado.
Sin embargo, la semana pasado se produjeron nuevas denuncias, probablemente de parte de colegas de Hoyzer, lo que dio origen a una nueva investigación que ha llevado al copresidente de la DFB Theo Zwanziger a la convicción de que la menos en el duelo Hamburgo-Paderborn hubo manipulación.
El caso ha llevado a que se tomen bajo la lupa otras intervenciones de Hoyzer en las que decisiones equivocadas suyas han perjudicado al favorito.
Hoyzer había renunciado a su cargo de árbitro y había cancelado su pertenencia al club deportivo del que formaba parte, el Hertha Berlín, con lo que había quedado fuera de la jurisdicción de la DFB lo que hacía imposible una sanción deportiva.
Sin embargo, posteriormente los abogados de Hoyzer han alegado que esos pasos los dio bajo presión de la DFB y que por lo tanto no tienen validez.