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Armstrong ganó por séptima vez el Tour de Francia y se retira del ciclismo

Frente a las malas condiciones climáticas, la organización de la competencia decidió neutralizar la carrera tras la primera de ocho vueltas en los Campos Elíseos.

24 de Julio de 2005 | 10:57 | Agencias
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PARÍS.- Justo cuando los competidores ingresaban a París, en la última etapa del Tour de Francia, una fuerte lluvia obligó a los organizadores a dar por terminada una de las más importantes competencias del ciclismo mundial.

De esta manera, el estadounidense Lance Armstrong ganaba por séptima vez consecutiva el Tour de Francia, dejando atrás a sus dos rivales más potentes: el italiano Ivan Basso y el alemán Jan Ullrich.

Junto con el fin de la principal prueba del calendario, Armstrong, quien representaba al equipo de Discovery Channel, terminó su carrera profesional como ciclista.

Armstrong, nacido en Austin hace 33 años, agotó durante siete años los calificativos, y es el único ciclista de la historia en ganar tantas veces la carrera ciclista más importante y exigente del mundo.

La despedida del escenario del ciclismo fue tan perfecta como sus actuaciones desde el año 1999. En lo más alto del podio de los ganadores, de donde nunca bajó, con su séptimo Tour consecutivo, Lance Armstrong disfrutó del último aplauso de su carrera, que hoy concluyó dando inicio a una leyenda que, al parecer, durará siempre.

Acompañado de sus hijos y su pareja, la cantante Sheryl Crow, el estadounidense se despidió del Tour y del ciclismo.

Sus rivales se frotan las manos. En 2006 Jan Ullrich y la nueva generación de corredores como Ivan Basso y Damiano Cunego o el español Alejandro Valverde aspiran a sucederlo.

"Ahora deseo 50 años sin estrés para disfrutar de la familia. Sé que la gente olvida pronto a las estrellas del deporte", dijo ayer Armstrong, que reconoce que tiene suficiente dinero para no trabajar más, y que seguirá ligado al ciclismo de alguna manera.

"Beberé cerveza, vino y quizás Sheryl me enseñe a tocar la guitarra", afirmó entre bromas sobre la relajada vida que le espera. La nueva vida de Lance Armstrong tras la meticulosidad y la precisión que lo instalaron como la mayor leyenda del ciclismo.