ROMA.- El secretario de la comisión arbitral (CAM) de la Federación Italiana de Fútbol, Manfredi Martino, ha sido el primero en confesar sobre el escándalo que está salpicando al fútbol italiano: los sorteos arbitrales estaban arreglados.
Ayer se lo contó todo al responsable de las investigación de la Federación de fútbol, Francesco Saverio Borrelli, según publica hoy el diario La Gazzetta dello Sport.
Martino confirmó lo que ya había declarado el ex árbitro Pirrone, que los sorteos de los árbitros estaban arreglados y que los designadores arbitrales de la temporada 2004-2005, Pierluigi Pairetto o Paolo Bergamo, junto a la secretaria del CAM, Maria Grazia Fazi, marcaban las bolas del sorteo.
El sorteo, que se realizaba ante notarios y periodistas, estaba ya desde el principio arreglado pues antes, en una habitación, Bergamo y Fazi y a veces Pairetto marcaban las bolas con los nombres de los árbitros, aunque a veces, como reveló Martino, servía sólo considerar un partido más o menos importante y combinarlo con las listas de los árbitros que ellos creían que eran los más apropiados, que al final eran los amigos de los equipos implicados.
Hasta ahora, tanto la justicia ordinaria como la justicia deportiva contaba sólo con las interceptaciones telefónicas al ex director general de la Juventus, Luciano Moggi, y las de otros dirigentes federativos, en las que se hablaba de las designaciones, pero todos los interrogados hasta ahora manifestaron su inocencia.
"Trabajamos mucho y algún resultado ya tenemos. Nos hicimos una idea sobre lo que pasaba en el fútbol y ahora tenemos que probar que sea verdad", añadió Borrelli, que ayer interrogó a algunos jueces de línea y representantes de la CAM y de la Federación. Hoy será el turno de los árbitros Paolo Dondarini y Domenico Messina, que aparecen en varias ocasiones en las grabaciones.
