Aunque se acepte su nacionalidad española, Claudio Bravo podrá seguir siendo el capitán de la ''Roja''.
Claudio Cortés, El MercurioComo sucede con casi la totalidad de los países latinoamericanos, todos los ciudadanos chilenos que trabajan en España dos años con tarjeta de residente tienen la posibilidad de pedir la doble nacionalidad. Bravo cumple este requisito de sobra al estar completando su tercera temporada en Donostia.
Y el equipo del oriundo de Buin ya inició los trámites requeridos para la nacionalización del ex arquero de Colo Colo.
El club realista envió hace unas semanas la información que le exigían al meta para complementar la petición formalmente y que tuvo que recabar en Chile.
En principio se desconoce cuanto tiempo durará el proceso, ya que, por ahora, la Real y el portero deben mantenerse a la espera para comprobar si se aceptan todos los documentos que han remitido.
A la Real le interesa mucho que el mejor portero de la B española de esta temporada obtenga la nacionalidad española porque pasaría a ser un jugador comunitario, lo que le abriría las puertas de muchos clubes de Primera División, que no quieren ocupar uno de los puestos de extracomunitario con un portero.
En estos momentos el chileno aparece como el activo por el que mejor negocio puede hacer la Real este verano, ya que él mismo ha demostrado en repetidas ocasiones ser ambicioso y soñar con jugar en un club de mayores pretensiones. Por lo menos, siempre ha dejado claro su agradecimiento a la Real y que nunca se marcharía si su venta no le reporta un interesante beneficio.