Sven Goran Eriksson festejó victoria sobre Costa Rica "a la mexicana"

CIUDAD DE MÉXICO.- El tanque de oxígeno que recibió con la victoria sobre Costa Rica puso de muy buen humor al entrenador de la selección mexicana de fútbol Sven Goran Eriksson, quien dio muestras de algunas cosas extra fútbol que ha aprendido desde su llegada al timón azteca en el verano pasado.

Eriksson, quien había dicho que perdería su trabajo como seleccionador mexicano si no vencía a los ticos por las clasificatorias mundialistas respondió fuerte y claro cuando un reportero local le preguntó cómo se sentía tras lograr sus primeros tres puntos del hexagonal final de la CONCACAF.

"Como dicen los mexicanos, me siento de 'poca madre'", dijo Eriksson entre risas en una rueda de prensa posterior al encuentro. "Me siento muy bien, pienso que el equipo ha hecho un trabajo profesional muy bueno, Costa Rica tiene buen equipo, pero México fue el patrón de la cancha, es un resultado muy importante", agregó.

Y vaya que lo es. Con la victoria, México rompió una racha de cuatro encuentros en fila sin victoria, tres de ellos derrotas para empatar la cima del hexagonal de la CONCACAF en el que seis equipos buscan tres lugares directos y un repachaje para Sudáfrica 2010.

"Fue muy importante ganar para México como país que busca la clasificación al Mundial porque perdimos el primer juego, ahora el segundo juego en casa teníamos que ganar, fue un buen partido en el que pudimos hacer más goles, pero un 2-0 convenció", sostuvo.

Ahora los mexicanos deberán lidiar con el que ha sido su eterno problema en las clasificatorias: ganar fuera de casa, cuando visiten al complicado Honduras el miércoles en San Pedro Sula.

Honduras venció a México 1-0 a finales del 2008 en la ronda de grupos de la eliminatoria. "Es importante, tenemos que jugar mejor contra Honduras que la última vez, si queremos ganar tenemos que jugar como hoy, no como meses atrás", concluyó Eriksson.