ROMA.- El suizo Roger Federer reconoció frustrado que sus tiempos de dominador del tenis mundial son ya una cuestión del pasado. "Me había acostumbrado a ganar torneos, esto deja un sabor amargo, obviamente", dijo el suizo tras la derrota por 4-6, 6-3 y 6-3 ante el serbio Novak Djokovic en las semifinales del Abierto de Roma.
"No necesitaré demasiado tiempo para superarlo, pero en el momento, sencillamente, no es divertido", añadió el hombre que dominó el tenis mundial entre 2004 y 2007.
Federer, dos veces finalista en la arcilla del Foro Itálico, se imponía 6-4, 2-1 y tenía el saque cuando la lluvia obligó a interrumpir el partido. Tras una hora de pausa el escenario cambió, y bajo el sol romano Federer fue incapaz de cerrar la que parecía una victoria cercana. Djokovic, inspirado, dio vuelta la historia.
La de hoy fue la segunda victoria consecutiva de Djokovic sobre Federer, tras la lograda el mes pasado en el cemento de Miami, un partido en el que el suizo destrozó una raqueta en pleno encuentro por primera vez desde que se tenga memoria.
"En realidad comencé muy bien", dijo Federer, que reconoció que debe trabajar en un servicio que modificó tras su lesión de espalda en febrero. "Creo que él volvió con un poco más de energía tras la suspensión por lluvia. Antes de ella estaba bastante bajo. De repente, el partido cambió y él jugó diferente", añadió.
