El ex ariete hispano ha marcado sólo un gol en ocho partidos por los millonarios.
AFP
SANTIAGO.- Para cualquier futbolista pasar del fútbol chileno al argentino es un gran paso en su carrera, pero pasar a River Plate debe ser un enorme salto. Eso fue lo que vivió Gustavo Canales a principio de la temporada 2010, cuando dejó Unión Española para integrarse a un alicaído club millonario.
Hasta ahora lo que parecía un sueño se está transformando lentamente en un pesadilla. El ex ariete hispano ha anotado sólo un gol en ocho encuentros y la prensa e hinchada trasandina comienza a cargarle la mano.
"Al no convertir en un club como River es normal que se caiga sobre mi porque soy el que tiene la responsabilidad de hacerlo, pero tambien sé que hay cosas por mejorar en lo grupal y, si conseguimos eso, todos nos vamos a destacar un poco más", analizó Canales en diálogo con radio La Red.
Pero el argentino no quiso dar excusas y realizó una fuerte autocrítica. "Me dieron la posibilidad de jugar en varios partidos y que yo no encuentre el nivel que quiero no pasa por la adaptación. No puedo poner eso como excusa porque creo que ya estoy en ritmo para dar lo que pretendo", dijo.
Sobre el actual nivel de River, que marcha 16° con 9 puntos en el Clausura, el atacante fue claro: "Cuando el equipo pierde, uno se reprocha las situaciones que desaprovechó. No podemos encontrar la regularidad que queremos y estamos pecando de no ser contundentes en los últimos metros".
"El hecho de no marcar y que nos conviertan, y empezar remándola de abajo, hacen las cosas más difíciles", añadió.