Gabriel Ruiz-Tagle (al centro), junto a Etienne Lavigne, director de la prueba, y Enrique Meyer, Secretario de Turismo argentino.
AP
SANTIAGO.- El confirmado regreso del Rally Dakar a Chile en 2011 fue recibido hoy como un aliciente para la recuperación de la industria turística del país, azotado en febrero por uno de los peores terremotos de la historia.
"Este Dakar nos ayudará a mirar hacia el futuro y demostrar que Chile es capaz de superar tal desgracia", comentó el subsecretario de Chiledeportes chileno, Gabriel Ruiz Tagle, en el comunicado oficial que confirmó el regreso del Rally a Sudamérica.
"Estamos convencidos de que este auténtico festival internacional del deporte es la manera perfecta de mostrar los lugares únicos de nuestro país al resto del mundo", agregó el funcionario tras llegar a un acuerdo con Amaury Sport Organisation (ASO), firma dueña del evento.
De hecho, Chile es un país de lagos, volcanes, islas, desiertos, viñedos y glaciares que explota el turismo de aventura como su principal carta de presentación.
Por ello, el Rally Dakar es un evento prioritario para el gobierno, que invierte millones de dólares en su realización desde 2009, cuando la prueba se corrió por primera vez fuera de Africa debido a las amenazas terroristas en Mauritania.
Las versiones iniciales indican que la prueba volverá por tercer año consecutivo a cruzar el desierto chileno ante la falta de nuevos trazados, justamente la zona no afectada por el movimiento telúrico, que tuvo su epicentro en el sur del país.
Pero ello no será sinónimo de tranquilidad. Los sismólogos avizoran desde hace años que precisamente el norte chileno será escenario en algún momento de un terremoto gigante, como el que sacudió esa zona en 1870.
Sin embargo, esa no será la única dificultad que deberán sortear los organizadores, pues arqueólogos y ecologistas ya anunciaron su oposición al evento.
El Colegio de Arqueólogos incluso apuntó que las miles de huellas que los rodados dejan por el desierto afectan al patrimonio natural y cultural, afectando finalmente al turismo que se desea apoyar.
Los ecologistas, liderados por el activista Luis Mariano Rendón, insisten en que pedirán a la Justicia suspender el evento, como intentan sin éxito desde que la prueba pisó Sudamérica.
Oficialmente indiferente a las polémicas, la empresa organizadora de la prueba, ASO, destacó los múltiples motivos para disputar la prueba en Sudamérica nuevamentre, entre el 1 al 16 de enero de 2011.
Entre ellas, valoró "las excelentes relaciones con ambos países, las vitales bazas en términos deportivos, así como el entusiasmo visto entre los espectadores".
Pero ASO tampoco cerró la puerta al retorno a Africa, opción que rechazan en Chile y Argentina."Para los próximos años, los organizadores del Rally van a seguir trabajando en varios proyectos, en particular en la posibilidad de un regreso al continente africano", dijo hoy la empresa.