DOHA.- España mostró hoy su superioridad ante Uruguay al ganar por 3-1 en un amistoso que reunió a los campeones de Europa y América y que fue decidido por la calidad de los atacantes del viejo continente.
La selección de Vicente del Bosque impuso su fútbol de toque, que marcó la diferencia especialmente en la segunda parte, donde los goles de un gran Pedro decantaron la victoria.
La primera parte fue muy igualada porque Uruguay se paró bien en defensa y discutió el balón a España. Además, Edinson Cavani fue una amenaza para la zaga de Del Bosque, en la que debutó en el lateral César Azpilicueta.
España se adelantó a los 16 minutos con un regalo de Muslera. Cesc Fábregas disparó desde muy lejos y el arquero uruguayo se enredó estrepitosamente para conceder la ventaja española ante la incredulidad de la grada.
Se esperaba que España pasara a dominar a partir de entonces, sobre todo teniendo en cuenta un esquema que excluía un delantero puro para llenar la medular. Pero no ocurrió porque Uruguay mostró personalidad y ambición.
Y ocurrió que Uruguay igualó a los 31 minutos, en una perfecta maniobra en ataque. Cáceres puso un sensacional pase sobre "Cebolla" Rodríguez, quien definió con mucha categoría ante la salida de Víctor Valdés, elegido por Del Bosque para sustituir al lesionado Casillas.
En el descanso se marchó Carlos Puyol, quien sumó 100 internacionalidades con España.
En la segunda parte se vio a la mejor España, que desniveló el marcador a los 51 minutos. Gerard Piqué puso un balón profundo y Pedro marcó con un espectacular lanzamiento cruzado, una de las especialidades del atacante del Barcelona.
A partir de entonces, con Andrés Iniesta a la cabeza, España pasó a acaparar el dominio del partido ante una Uruguay que comenzó a sufrir.
El equipo de Oscar Washington Tabárez tuvo su gran oportunidad a los 57 minutos, en un gran disparo de Cavani al que respondió Valdés con un vuelo espectacular. Ahí se acabó el arsenal de Uruguay.
Después vino la habitual rueda de cambios, que acabó beneficiando a España, y la selección de Del Bosque sentenció a los 75 minutos tras una jugada clásica de los campeones del mundo, que llegaron al área tirando paredes para que de nuevo Pedro resolviera.
Del Bosque aprovechó para presentar dos nuevos jugadores, Mario Suárez e Isco, y el partido se marchó entre incontables toques al balón de los españoles.
El campeón del mundo demostró tal condición ante una Uruguay que sólo plantó oposición en la primera parte.