SANTIAGO.- El vicepresidente ejecutivo de Pisco Capel, Francisco Peñafiel, afirmó hoy que "el peor de los males para los productores de pisco sería que el Gobierno opte por una tasa única alta para todos los licores tanto nacionales como importados, sin distinción de origen ni tipo de producto", en el marco de la disposición emanada de la OMC tendiente a que Chile debe modificar su ley de alcoholes a más tardar el 1 de marzo del 2001.
Ello a raíz del fallo adoptado por el organismo internacional, acogiendo una petición de los productores de whisky europeos, que acusaron a nuestro país de trato discriminatorio a los licores importados.
En conversación con Radio Cooperativa, Peñafiel sostuvo que de llevarse a cabo esta medida por parte del gobierno chileno, significaría que en el fondo la baja del impuesto al whisky estaría financiada por un alza al impuesto del pisco, "lo cual sería una situación alarmante de llegar a producirse".
"Esto hay que tomarlo más que un problema industrial, es un problema agrícola", precisó el empresario, detallando que hoy el pisco de 35 grados paga un 25 por ciento de impuesto y a contar del 1 de diciembre un 27 por ciento.
Agregó que si este tributo sube a un 35 por ciento la industria pisquera le reportará más de 5 mil millones de pesos de carga tributaria adicional, "que es una suma que va a pagar a través de su disminución de su rentabilidad la mayor parte de los productores pisqueros de la Tercera y Cuarta regiones".
Consultado sobre la visita de productores de whisky a Chile, manifestó Peñafiel "ellos han venido buscando un afán conciliatorio al tratar de ir acercando posiciones", al tiempo que recordó que los sectores laborales, adheridos a la industria pisquera, han estado propiciando una ley que fije una tasa única por graduación alcohólica, lo que constituye una tesis no aceptable por parte de los europeos.
En este contexto, expresó que una tasa única alta tampoco es del agrado de los productores de whisky como de los países miembros de la Unión Europea.