RIO DE JANEIRO.- La justicia brasileña aprobó este lunes la venta de la aerolínea Varig al consorcio de trabajadores NV Participaçoes, que ofreció 449 millones de dólares, anunció el juez encargado de la recuperación judicial de la compañía.
"El consorcio ya presentó los esclarecimientos y las garantías necesarios y la justicia está satisfecha", declaró este lunes el juez Roberto Ayoub en conferencia de prensa.
Ayoub había cuestionado la oferta de NV Participaçoes porque éste incluyó en su forma de pago la emisión de bonos a 20 años; una forma no prevista en el pliego de la licitación. El juez pospuso durante dos semanas su resolución para cerciorarse de que los adquirentes disponian de credito suficiente.
El consorcio, que está formado el Grupo Trabajadores de Varig (TGV) deberá depositar en las próximas 72 horas, 75 millones de dólares y, de no hacerlo, la venta será anulada, dijo Ayoub.
"Deseamos ahora que ese grupo maravilloso de esa empresa maravillosa consiga salvar a Varig", dijo Ayoub quien siempre proclamó su deseo de evitar a toda costa la quiebra de la empresa.
El representante de TGV Marcio Marsilac, dijo que el grupo adquirente tiene el apoyo de otros dos inversores pero se negó a idenitificarlos. Agregó que el martes, NV Partipacoes se reunirá con directivos de Varig para elaborar un plan de contingencia que incluirá la devolución de 19 aviones de los 49 que están operando.
El grupo se comprometió a pagar 449 millones de dólares; casi la mitad del precio base con que la empresa fue a remate el 7 de junio. Ninguno de las otras cinco corporaciones presentes en la subasta hicieron ofertas.
Varig está al borde de la bancarrota, con deudas por más de 3.000 millones de dólares y no dispone de dinero para pagar ni a sus proveedores ni a sus 10.600 empleados. En la última semana, suspendió unos 230 vuelos nacionales y domésticos y el gobierno elaboró un plan de emergencia para atender a sus 16 mil viajeros, entre ellos 5.000 que están en la Copa del Mundo de Fútbol.
Los acreedores extranjeros de la compañía reclaman ante la Justica de Quiebras de Nueva York el secuestro de una veintena de aviones debido a que Varig no paga el arrendamiento de las aeronave. El miércoles ese juez decidirá si mantiene o no la prohibición de secuestrar los aparatos, como reclaman los acreedores.
Fundada en 1927, la aerolínea conoció su apogeo en los años 70, pero comenzó a declinar en 1986, cuando a causa de la hiperinflación, el gobierno congeló las tarifas aéreas hasta 1991. Su crisis se agudizó a partir de ese año cuando perdió el monopolio de los viajes al exterior.
Varig reclama judicialmente la compensación de las pérdidas generadas por esa política, estimadas en 2.000 millones de dólares.
